El partido de baloncesto entre La Salle y el Andratx de Primera Autonómica Masculina concluyó antes de lo previsto por una agresión a uno de los colegiados, Pablo Sierra, que se ha visto obligado a pasar dos noches en observación en la Clínica Juaneda. El árbitro recibió un golpe en la cabeza por parte de un jugador del Andratx y permanece ingresado por un esguince cervical y un coágulo de sangre en la parte posterior de la cabeza que ha llevado a los médicos a extremar las precauciones, aunque, tras las primeras pruebas, la incidencia no reviste gravedad.
Pablo Sierra relata que fue increpado por el jugador del Andratx Pedro Oliver al señalar un saque de lateral favorable a La Salle. El colegiado castigó al jugador visitante con una técnica y asegura que posteriormente fue zancadilleado por éste cuando pasó junto al banquillo. Procedió a expulsarle y Oliver reaccionó golpeándole en la zona posterior de la cabeza. Sierra manifiesta que a consecuencia del golpe cayó al suelo y perdió el conocimiento quedándose tendido sobre el parquet, donde fue atendido antes de ser trasladado. Una vez en la Clínica Juaneda se le practicó un TAC y hoy sigue ingresado recuperándose.
El colegiado asegura que es la primera ocasión en 16 años de carrera arbitral que sufre un incidente de esta índole y lamenta que nadie del Andratx se haya puesto en contacto con él para interesarse por su situación. Sierra negó haber tenido enfrentamientos previos con el club y que mediara provocación alguna. «No veo lógica a lo sucedido, porque en la pista todos somos deportistas que acertamos o nos equivocamos sin ánimo de querer fastidiar a nadie. Aunque tengamos tareas diferentes en la pista, todos compartimos la misma pasión por el deporte, pero me parece lamentable llegar a este punto», dijo el árbitro, que afirma el incidente no le ha quitado las ganas de volver a pitar.
Versión
El CB Andratx lamenta la agresión y matiza algunos aspectos del inicidente. Un integrante de la directiva aprecia que su jugador no tuvo intención zancadillear al árbitro tras señalarle la técnica y que el golpe al colegiado cuando le señala la descalificante se produce con la parte externa de la mano sin ánimo de impactar como un puñetazo. El club se confiesa impactado por el suceso y no defiende la agresión, aunque considera exagerada la reacción del árbitro, que, según la versión del conjunto visitante, no quiso levantarse del parquet hasta que llegara la ambulancia ya que Sierra aducía tener problemas de epilepsia.
La directiva del club andritxol tiene previsto comunicarle hoy a su jugador que causará baja lo que resta de temporada. El jugador ha pedido disculpas al club y al presidente del Comitè d'Àrbitres de la Federació de Bàsquet, Antoni Salas, que siguió de cerca la evolución de Sierra y lamentó el incidente.