Tras arrancar con fuerza la temporada, el Palmer Basket Mallorca aspira a dar otro acelerón en el primer derbi balear del curso ante el Sant Antoni. Los hombres de Óscar Olivenza se sitúan este sábado (19:30) frente a uno de los aspirantes a pelear por las posiciones de privilegio en un test de altura que calibrará las progresión de ambos proyectos en el primer tramo de la LEB Plata, donde los dos irrumpen en la tercera jornada con la condición de invictos y con la oportunidad de .
«Sabemos que jugar en la cancha del Bàsquet Sant Antoni es uno de los desafíos más difíciles de la temporada, pero confiamos plenamente en nuestra capacidad. Estamos preparados para luchar y buscar la victoria», expresó en la víspera el técnico del Palmer Basket Mallorca, que dispone de todos sus efectivos para intentar asaltar el Polideportivo Sa Pedrera de Sant Antoni de Portmany, donde también tendrá que hacer frente a una atmósfera especial.
Con su victoria en Salou y el triunfo la pasada jornada en Son Moix ante el Gran Canaria B, los mallorquines han dejado constancia de que la etiqueta de recién ascendido no le pesa a un grupo que ahora ve como se eleva la exigencia de su andadura. No en vano el Sant Antoni ya peleó por el ascenso el pasado ejercicio y vuelve a presentar candidatura en un choque en el que pretende dar un golpe sobre la mesa.
La dirección de Daniel de la Rúa y los puntos de Jordi Grimau son dos de los grandes argumentos de locales y por lo tanto las amenazas para un Palmer Basket Mallorca que ha demostrado un notable rendimiento individual al servicio del colectivo. Urbutis y Mendiola en la pintura y la capacidad anotadora de Ryan Nichollas alimentan las opciones de la escuadra de Óscar Olivenza, que quiere dar un paso más en su crecimiento en un duelo que servirá de termómetro para sus intenciones.