El Fibwi Palma se permite soñar con alcanzar la final por el ascenso a la LEB Oro. Tras levantar un partido que parecía imposible, el equipo de Pau Tomàs se impuso al potente Clavijo (67-65) y llegará al partido de vuelta de la eliminatoria con ventaja inicial y obligando a los riojanos a hacerse fuertes en su cancha frente al cuadro balear, que tiró de orgullo para llegar vivo al partido de vuelta.
Pese a que salió firme el Fibwi, buscando marcar distancias sobre un rival más potente y con mayor fondo de armario (7-1), enseguida se metió en el partido el Clavijo, que con Berni García en pista ganó en velocidad y movilidad del balón. A ello se unió la mayor intensidad defensiva de los riojanos, junto a la carga de faltas del equipo de Pau Tomàs, que veía cómo justo en el ecuador del primer cuarto ya tomaba la ventaja el cuadro visitante (10-11).
Fue una primera brecha, distancia de seguridad que se vio reducida tras una serie de errores riojanos que aprovecharon Tamba y Kovacevic para devolver la emoción al duelo (15-18), aunque un 0-6 de salida del Clavijo cayó como una losa. Al ritmo de García, el cuadro visitante despegó y dejó noqueado a un Fibwi sin capacidad de respuesta. Con un 2-14, los de Jenaro Díaz presentaron sus credenciales hasta irse dieciséis arriba (20-36) en pleno colapso balear.
Tiró de orgullo rumbo al descanso el cinco verdinegro y cogió bajo de defensas a su rival para, de la mano de Kovacevic y Zengotitabengoa, firmar un 8-3 con el que alcanzar el descanso diez abajo (34-44), una dinámica que continuó tras el parón, con Kovacevic y Suskavcevic percutiendo en la pintura visitante, poniendo a cuatro al Fibwi tras un triple de Asier (42-46).
Sabía el Palma que era el momento de dar un golpe sobre la mesa y viajar a Logroño con licencia para soñar. Y así fue. Respondió el equipo de Pau Tomás a todos los reveses y un vuelo espectacular de Feliu acabó en una canasta que ponía en pie a Son Moix (47-49), donde ya se creía en una remontada espectacular. Porque el enorme trabajo defensivo había sacado de la pista al Clavijo, al que llevaba al límite el cuadro balear, con seis puntos seguidos de Feliu igualaba el duelo y la eliminatoria (51-51), culminando su gesta de la mano de Font (53-51) para cambiar el sino del cruce y elevar la temperatura. La historia había cambiado radicalmente en cuestión de minutos, los diez en los que apenas anotó 8 puntos el Clavijo, siendo atropellado por un Fibwi Palma crecido y espoleado por el Palau, cerrando el tercer acto tres arriba (55-52).
Estaba fuera del partido el Clavijo, sometido el ritmo que le puso Feliu. Abrió hueco el equipo de Tomàs, que más allá de la victoria podía ilusionarse con una renta notable para la vuelta. Más tras una penetración de Font que puso la máxima para los mallorquines (61-52) con un 6-0 de arranque. Había cortocircuitado el equipo de Jenaro Díaz, que pasó de estar 16 arriba a verse 9 abajo. Ver para creer.
Sabedor de que le iba la vida, irrumpió en el partido el Clavijo para, poco a poco, arañar esa desventaja, pese a un triple de Castillo que pareció letal (66-59). Nicolau y Balasko apretaron las tuercas a un Fibwi que veía reducida su renta en menos de un minuto (66-63) y tenía otros dos para intentar estirar el margen. Lo hizo, con un tiro de Zengotitabengoa, pero una antideportiva de Font permitió al Clavijo respirar. Berni García anotó los dos tiros libres (67-65), pero los riojanos desperdiciaron la posesión. La última iba a ser para el Fibwi. Campo atrás de Zengotitabengoa con seis segundos por delante y bola para Clavijo. Torres falla el tiro decisivo y el Palma se lleva una victoria (67-65) que les permitirá viajar con una mínima renta a Logroño. Y soñar.
67 - Fibwi Palma (15+19+21+12): Font (11), Suskavcevic (10), Feliu (6), Kovacevic (12), Zengotitabengoa (16), -cinco inicial- Antúnez (2), Castillo (6) y Tamba (4).
65 - Rioverde Clavijo (20+24+8+13): De Pablo (4), Coffi (6), Nicolau (7), Norris (3), Balasko (11), -cinco inicial- Iglesias (8), Diakhate (5), García (11), Torres (0) y Ukawuba (8).
Árbitros. Aranzana García y Borrego Rodríguez. Técnica a Coffi y antideportiva a Font.
Incidencias: Palau de Son Moix. Unos 1.200 espectadores. Se estrenaron los nuevos videomarcadores.