Las reacciones al anuncio de Robert Sarver de poner en venta los Suns y los Mercury no se han hecho esperar. Además de la NBA, LeBron James ha expresado su satisfacción por la decisión del propietario de la franquicia de Arizona una semana después de ser sancionado durante un año y castigado a pagar una multa de 10 millones de dólares por comentarios racistas y misóginos a lo largo de sus 18 años como máximo responsable de los equipos de baloncesto de Phoenix.
LeBron James, que días atrás se mostró crítico con la resolución de la NBA, ha valorado de forma positiva la decisión del accionista del Real Mallorca de poner en venta su franquicia. «Estoy muy orgulloso de formar parte de una liga comprometida con el progreso», ha valorado la estrella de Los Angeles Lakers, cuyas palabras hace una semana ya tuvieron una amplia repercusión y mucho peso en la mejor liga del mundo.
Otras estrellas como Draymond Green o la asociación de jugadores profesionales ya expresaron su malestar por la tibieza con la que, según ellos, había actuado la NBA en un caso que en anteriores episodios había obligado a un propietario a tener que deshacerse de su franquicia. En esta ocasión ha sido el propio Robert Sarver el que ha abogado por dar un paso al costado para evitar mayores problemas tanto a la liga como a los propios equipos. No en vano uno de los patrocinadores más importantes de Phoenix como Paypal había anunciado su intención de abandonar su colaboración si el empresario estadounidense se mantenía en el cargo tras darse a conocer los detalles de la investigación realizada por la liga después de que ESPN denunciara los hechos..