El deporte, y en este caso más concreto el baloncesto, es una escuela de valores que dejó días atrás una nueva muestra en forma de fotografía de lo que es y debe ser la formación de los más pequeños y el compañerismo y el espíritu de equipo que debe reinar en una modalidad como esta. Sucedió en las filas del Consell-Bionorica, el equipo Premini (2004) de la entidad de es Raiguer, un ejemplo en el trabajo con la cantera y la potenciación de muchas otras facetas más allá del juego en sí.
Jordi y Marina, dos integrantes de este conjunto, dejaron para la posteridad una imagen que el Club Bàsquet Consell ha compartido en las redes sociales y ha causado un enorme impacto positivo por lo mucho que transmite esa fotografía. En la misma, se observa a Marina animando y acompañando a Jordi después de que este último sufriera un golpe al caerse en un lance del partido. Ella estuvo pendiente de su amigo y le ayudó a llegar hasta su entrenadora para poder recuperarse del susto y seguir en el partido, disputado en la pista del Hispania.
Sin duda, el gesto de Marina hacia Jordi es todo un ejemplo a seguir y así quedó plasmado en el aplauso unánime que ha recibido la instantánea por parte de gente del baloncesto, pero también por personas no vinculadas a este deporte ni a ninguna modalidad, pues la fuerza del documento queda patente con el gesto de Marina, arropando a su compañero ante una situación adversa durante un partido. Una acción llena de sentimiento y que se ha ganado el reconocimiento social.