El B the travel brand Mallorca Palma sigue negado. Este sábado ha recibido una nueva bofetada (68-67) en su visita al Palacio de los Deportes de Granada en un partido en el que llegó con opciones a los instantes finales pero acabó hincando la rodilla después de que David Iriarte frenara la última acción de Thomas Bropleh.
Los hombres de Félix Alonso regresaban a la competición tras el parón propiciado por la disputada de las ventanas FIBA y pretendían invertir su mala dinámica de juego y resultados, pero encajaron un duro golpe al encadenar su cuarta derrota consecutiva y caer a la sexta plaza a expensas del resultado que se produzca este domingo entre el Gipuzkoa y el Melilla.
Las ganas de redención de los mallorquines se vieron pronto difuminadas por la puesta en escena del Granada, que volvía a su fortaleza particular dispuesto a recuperar sus mejores prestaciones. Los de Juan Pablo Pin se crecen cuando juegan ante su afición y desde el salto inicial dejaron constancia del nivel de intensidad con el que iban a emplearse en cada acción.
Los dos primeros puntos de Matt Stainbrook serían la primera y casi única ventaja de los visitantes, que ya sólo recuperarían el mando en el marcador en el tramo final del partido. Fue a partir del 7-7 cuando el Covirán Granada logró despegarse en el marcador merced a un parcial de 7-0 que le permitió jugar con mayor tranquilidad gracias a sus primeras rentas favorables.
Aparecieron Álex Hernández y Lindqvist para impedir que la brecha se agrandase, aunque los locales por mediación de Mykal Riley y Guille Rubio, que acabó como gran estrella del Covirán Granada con 37 de valoración (21 puntos y 9 rebotes), permitieron que el conjunto andaluz diera carpetazo a los primeros diez minutos del encuentro con ventaja (22-16).
La igualdad fue la tónica de todo el duelo y se intensificó en el segundo parcial, cuando un triple de Tomàs y un tiro libre de Erik Quintela obligaron a Pablo Pin a pedir tiempo muerto para sofocar la reacción un BTTB que parecía acabar con la espesura mostrada en ataque. Volvieron a carburar los locales obligando a que Félix Alonso a parar el duelo, en el que una canasta de Kapelan instaló la que sería la máxima ventaja 35-25. Un parcial de 0-7 culminado por dos puntos de Stainbrook colocó el 35-32 en el último minuto del segundo cuarto. Earl Watson se encargó de mandar el choque a los vestuarios con 37-32 en el luminoso.
El tiempo de descanso le dio otro aire al juego y los mallorquines mostraron algo más de fluidez pero incidiendo en su déficit en el tiro exterior y en desde la línea de personal. Bropleh y Álex Hernández siguieron apretando el choque, pero Kapelan, con cinco puntos seguidos, mantuvieron la mínima renta de los andaluces, que también presentaron muchos problemas para acertar más allá de los 6,75 metros. Dos tiros libres de Erik Quintela estrecharon aún más el choque en la última acción del tercer período, que bajó el telón con 50-48.
En el cuarto decisivo se dejó notar la presión en cada posesión y el BTTB Mallorca fue ganando terreno progresivamente hasta que dos tiros libres de Bivià colocaron el 58-57 y un triple de Lindqvist suponía la primera ventaja visitante desde el 0-2 (58-60 a 4:29 para la conclusión).
Un triple de Diego Kapelan y dos tiros libres de Guille Rubio moldeaban un parcial de 5-0 que subía el 66-62 al que acertaron a replicar los de Félix Alonso con otro acierto de tres de Barac y una canasta de Tunde que situaba el 66-67 con 44 segundos por disputarse.
El propio Tunde cometió su quinta personal mandando a Guille Rubio a la línea de tiros libres, donde convirtió sus dos lanzamientos y puso de nuevo por delante al Covirán Granada (68-67). Alonso solicitó tiempo para trazar la última acción del partido, pero el mallorquín David Iriarte acertó a defender el lanzamiento de Thomas Bropleh que no llegó a su destino.
El BTTB sufrió su cuarta derrota en un choque en cuyo resumen estadístico destacan algunos factores que acabarían por condenarle. Aunque los mallorquines capturaron más rebotes llegaron a conceder hasta 17 rechaces ofensivos para el Granada, que también estuvo condicionado por su pobre porcentaje de tiros de tres. Hasta 20 pérdidas fueron un lastre muy pesado para el conjunto palmesano, que pagó caro su falta de acierto desde la línea de personal al anotar la mitad de los lanzamientos que intentó.
GRANADA (22+15+13+18): Josep Pérez (2), Pardina (2), Iriarte (5), Watson (4), Kapelán (15) -cinco inicial-, Corts (8), Bortolussi (0), Martín (1), Rubio (21), Riley (8) y Olmos (2).
21 de 40 en tiros de dos, 4 de 26 en lanzamientos triples y 14 de 17 en tiros libres. 36 rebotes (17 ofensivos). 20 faltas personales.
BTTB (16+16+16+19): Álex Hernández (6), Bropleh (7), Bivià (8), Barac (10), Stainbrook (6) -cinco inicial-, Tunde (13), Lindqvist (9), Joan Tomàs (5), Lofberg (0) y Quintela (3).
16 de 30 en tiros de dos, 9 de 23 en lanzamientos triples y 8 de 16 en tiros libres. 36 rebotes (10 ofensivos). 18 faltas personales.