El CSKA Moscú se proclamó este domingo en Berlín campeón de Europa de baloncesto por séptima vez en su historia (tercera desde que existe la Euroliga), tras derrotar al Fenerbahce de Estambul en la final, resuelta en la prórroga por 96-101 (30-50/83-83).
El CSKA Moscú llegó a ir ganando por veinte puntos al descanso (30-50), por 21 (42-63) mediado el tercer cuarto y por 17 al inicio del capítulo final, pero el Fenerbahce reaccionó y consiguió forzar la prórroga.
En el tiempo extra, el CSKA soportó mejor la presión para apuntarse su séptimo título.
El equipo moscovita une este título a los conseguidos anteriormente en 1961, 1963, 1969, 1971, 2006 y 2008 -los dos últimos con la denominación de Eurligas-.
El CSKA supera al Maccabi Tel Aviv en el historial continental y se sitúa a dos títulos del equipo más laureado de Europa, el Real Madrid, con nueve.