España 66 - 56 Turquía
España (19+9+13+25): Nicholls (3), Torrens (28), Palau (5), Xargay (10) y Lyttle (18) -cinco inicial-, Domínguez, Martínez, Gil (2) y Cruz.
Turquía (20+7+12+17): Tuncluer, Alben (6), Yilmaz (18), Sanders (18) e Ivegin (5) -cinco inicial-, Palazoglu, Canitez (2), Koksal (3), Vardali (3) y Caglar (1).
Árbitros: Fernando Sampietro (ARG), Guilherme Locatelli (BRA) y Anne Panther (ALE). Laura Nicholls fue eliminada por cinco personales (min.39).
La selección española de baloncesto se clasificó, por primera vez en su historia, para la final del Mundial femenino al derrotar a la anfitriona Turquía por 66-56, con una Alba Torrens excepcional que acabó con el 'infierno' de las gradas del Fenerbahce Arena.
El 0-5 de salida en el primer minuto de juego, a favor de las turcas, fue un serio aviso para una selección española que reaccionó de inmediato con Alba Torrens a los mandos para devolver el parcial corregido y aumentado, 9-0 en los dos minutos siguientes.
Los dos equipos demostraron que tenían armas, ganas y opciones de llegar a la final. España comenzó a dar muestras de su poderío defensivo llevando a Turquía a consumir dos posesiones sin poder lanzar a canasta, mientras que Nevriye Yilmaz daba muestras de su calidad en ataque y en defensa.
Lucas Mondelo, seleccionador español, dijo a sus jugadoras antes de salir del vestuario: «No nos hemos levantado de la cama para perder», pero además había preparado algunas 'trampas' para sus rivales como llevar a la base, a Isil Alben, al lado izquierdo del ataque, y cargar el ataque por donde estuviera Yilmaz.
La pívot turca se cargó con dos personales y en el minuto 6 (14-13) tuvo que ser reservada en el banquillo. Poco antes la selección otomana había comenzado a defender en zona con buenos resultados para sus intereses.
Con los dos equipos desplegando sus estrategias el primer cuarto se solventó con un equilibrado 19-20 favorable a las locales.
En el segundo cuarto, los dos equipos decidieron apretar las clavijas en defensa.
Turquía siguió apostando por la zona y la selección española lo acusó por la intranquilidad que generó. De hecho la primera canasta de las nacionales no llegó hasta el minuto 15 (21-22), por obra de Torrens.
Yilmaz cometió la tercera personal y Sancho Lyttle estuvo unos minutos enorme dominando el rebote ofensivo. Marta Xargay jugó de '4' y eso permitió que se abrieran más los espacios, pero el cuarto acabó con un 9-7 y un 28-27 con el que los equipos marcharon a los vestuarios.
Con el marcador bajo en guarismos, cada balón comenzó a ser importante, 32-30 (min.24) y cada acción, también. A Laia Palau la pitaron una falta intencionada sobre Yilmaz (32-32) y la pívot también anotó otros dos tiros libres en la jugada posterior y un triple y otros dos puntos (32-39, min.25). Un 0-9, con la firma de Yilmaz en menos de dos minutos.
Un triple de Torrens acabó con la sangría que estaban sufriendo las españolas, que se aprestaron a recuperar el terreno perdido, 37-39 (min.27).
La defensa española siguió funcionando, pero la presión, los nervios y el cansancio comenzó a ir cobrando sus tributos con los fallos en ambos bandos.
Un robo con contragolpe finalizado por Lyttle devolvió la delantera en el marcador a España, 41-39 (min.29), que facturó un parcial de 9-0 a las otomanas. El tercer cuarto finalizó con 41-39 y todo por decidir.
Alba Torrens gritó con rabia un triple que inauguró los minutos de la verdad. España salió dispuesta a luchar hasta la extenuación por estar en la final y la alero mallorquina firmó los cinco primeros puntos del equipo, 46-43 (min.31.40).
El 'infierno' turco del Fenerbahce Arena comenzó a entrar en ebullición y a jugar su papel, máxime tras una técnica pitada al entrenador local, Ceyhun Yildizoglu.
En un abrir y cerrar de ojos el equipo español consiguió una ventaja de diez puntos (54-44) que a falta de seis minutos y medio pareció un tesoro. Mayor cuando Alba Torrens lo elevó a doce, 56-44.
La selección española comenzó a administrar la ventaja con el reloj, pero sin olvidarse de defender. Turquía fue a la desesperada y avisó de que el partido no estaba concluido, 60-50 a falta de 3.15 minutos.
El 'infierno' turco rugió como nunca, pero Alba Torrens con 28 puntos y 6 rebotes se encargó de acabar con él y de meter a España en la final del Mundial.