Los nuevos chicos de oro del baloncesto balear ya están en casa. Sergi García y Tomeu Rigo regresaron a Mallorca tras conseguir en Kiev el título europeo con la selección española Sub 16 y confirmarse como integrantes de una generación llamada a marcar la pauta en las categorías de formación. García, base del CTEIB, que la próxima temporada militará en el CAI Zaragoza, y Rigo, escolta del Cajasol sevillano, han sido protagonistas de la penúltima conquista de las selecciones de formación del baloncesto español, consolidadas como la gran potencia en el viejo continente en categorías inferiores. Además del oro, García (22'2 minutos, 8'3 puntos, 3'4 rebotes y 1'6 asistencias por partido) y Rigo (7 minutos y 2'1 puntos de media) ayudaron al combinado de José Ignacio Hernández a sellar el primero de sus objetivos: ganarse la plaza para el Mundial.
La España de Sergi y Tomeu fue de menos a más en la capital ucraniana, para mostrarse intratable en los cruces tras dos tropiezos ante Grecia y Alemania que parecieron complicar la singladura de los españoles, que dejaron en el camino a Croacia, Lituania o Italia para plantarse en la finalísima, en la que la siempre peligrosa y potente Serbia cedió en una emocionante prórroga (63-65) ante García, Rigo y sus compañeros de viaje.
Protagonismo
Sergi García fue uno de los hombres claves desde la línea de tiros libres en partidos y momentos decisivos. El director de juego isleño, tras ser protagonista del Jordan Classic en Brooklyn, ha vivido en Ucrania una experiencia que supone «hacer realidad un sueño. Nadie daba un duro por nosotros al principio, pero día a día hemos ido creciendo para llegar al tramo decisivo en la mejor forma». El base destacó «la dureza de los cruces», pero también la capacidad de superación del vestuario español ante las adversidades, sintiéndose «muy feliz por haber ayudado a obtener un éxito así». El jugador hasta ahora del CTEIB admitió que la presencia de dos mallorquines en la Sub 16 refleja «que las cosas se hacen bien en Balears, y esperemos que sigan saliendo buenos jugadores».
Por su parte, Tomeu Rigo admitió que «es una satisfacción muy grande haber vivido una experiencia inolvidable», en referencia al oro de Kiev, recalcando que el objetivo inicial «era clasificarnos para el Mundial». El dos ensalzó la unidad del grupo «en los momentos más difíciles, en especial tras perder con Alemania» y también su «solidez» en los cruces.
Ambos fueron agasajados por familiares y amigos en Son Sant Joan, donde también acudió en nombre de la FBIB su vicepresidenta, María Jaume.