CAI Zaragoza 55
Real Madrid 77
CAI Zaragoza (20+10+11+14): Stefansson (5), Cabezas (6), Archibald (5), Toppert (3), Aguilar (5) -cinco inicial- Burtschi (4), Wright (11), Van Rossom (-), Hettsheimeir (14), Fontet (2) y Almazán (-).
Real Madrid (5+31+20+21): Tomic (6), Carlos Suárez (6), Mirotic (6), Sergio Rodríguez (9), Carroll (12) -cinco inicial- Rudy Fernández (12), Sanz (-), Pocius (6), Reyes (3), Velickovic (6), Begic (4) y Llull (7).
Àrbitros: Redondo, Peruga y Soto. No hubo excluidos.
El Real Madrid se llevó el Trofeo "Ciudad de Zaragoza", que sirvió de presentación para el CAI Zaragoza ante su afición, en un partido que significó el debut de Rudy Fernández, que anotó 12 puntos, con la camiseta blanca.
El encuentro fue el propio de dos equipos en pretemporada, con falta de acoplamiento debido a que bastantes jugadores no han podido trabajar en lo que se lleva de ella y en el que el conjunto de Pablo Laso impuso su mayor calidad y profundidad de banquillo.
El enfrentamiento contó con el aliciente añadido para los espectadores del pabellón Príncipe Felipe de la presencia de tres campeones de Europa: Llull, Reyes y Rudy Fernández.
El resultado del primer cuarto fue tan sorprendente como inesperado, con un Real Madrid nefasto en el tiro (2 de 16 en lanzamientos de campo) y en el juego.
El conjunto madrileño sufrió un parcial, en esos diez minutos, de 20-5, que era todavía más sonrojante a falta de 4 minutos (12-0).
Sin embargo, Rudy Fernández se hizo notar en el segundo cuarto con 12 puntos en cinco minutos que le dejaron al final del partido como máximo anotador de su equipo junto a Carroll, aunque el norteamericano dispuso de 27 minutos frente a siete del español.
Estos puntos pusieron en la rampa de lanzamiento a los suyos, que recortaron distancias progresivamente hasta darle la vuelta al electrónico y llegar al descanso por delante (30-36), tras haber anotado 31 puntos en el segundo cuarto.
En el tercero hubo más control en el juego por parte de ambos conjuntos y el equipo de Pablo Laso defendió bien provocando los errores de los propietarios del terreno y abriendo una amplia brecha en el marcador, llegando a tener hasta 18 puntos de renta (38-56) a falta de un minuto para la conclusión de este parcial, que dejaron el partido decidido y que supuso que el último fuera de puro trámite.