A mediados del pasado mes de diciembre, Rudy Fernández paseaba su indolencia por las canchas de la NBA. Sin minutos, sin aportar prácticamente nada, el escolta mallorquín deambulaba por la mejor Liga del planeta. Sin embargo, una charla con su entrenador y la lesión de Brandon Roy, el jugador franquicia de los Blazers, alteró su destino.
Desde entonces, Rudy no solo ha mejorado sus números de forma notoria -ha pasado de 6 puntos y 14 minutos de medio a casi 12 en 28- sino que lidera la reacción de su equipo, que ha ganado seis de los ocho últimos partidos y que es octavo en la Conferencia Oeste (18-16). En los tres primeros partidos sin Roy, Rudy firmó un promedio de 19 puntos (26 de ellos ante Minnessota) y en seis de los ocho ha anotado al menos 10 puntos. La pasada madruga, los Portland se midieron a los Dallas Mavericks con la intención de encadenar una nueva victoria.
Por otra parte, los Heat de Miami y los Magic de Orlando ofrecieron una nueva exhibición de buen juego y dominio en la jornada de la NBA que les deparó su sexta victoria consecutiva.
Los Celtics de Boston también ganaron pero tuvieron que sufrir hasta el final antes de poder conseguir la victoria, y el alero estrella Carmelo Anthony se reencontró con su inspiración encestadora para volver a ser el líder en el triunfo de los Nuggets de Denver.
El entendimiento entre el alero LeBron James y el escolta Dwyane Wade cada día va a más y los grandes beneficiados son los Heat que no tuvieron problemas para ganar por 82-96 a los Bobcats de Charlotte en el duelo de equipos de la División Sureste. James quiso comenzar el nuevo año de manera triunfal y con 38 puntos.