«No quiero jugar más en la NBA, no me siento bien». Así resumió su sentir Rudy Fernández en el Media Day de los Portland Trail Blazers. El mallorquín no pudo reprimirse y su primera comparecencia en el Rose Garden no ha podido ser más contundente. «Voy a pedir a Portland que me libere. Espero que la afición me entienda», explicaba el balear, que plantea el regreso a Europa como única opción alternativa a seguir en Oregón. «Soy un profesional y por eso estoy aquí. Pero mi deseo es volver a casa, estar cerca de mi familia y mis amigos», prosiguió el subcampeón olímpico, que no contempla un traspaso, y lo deja claro al confesar que «no quiero oír nada de Chicago, New York u otra franquicia. He cumplido mi sueño de jugar en la NBA y con Nate (McMillan) he aprendido muchas cosas, pero mi estilo de juego se adapta más a Europa», donde Barça, Real Madrid y Panathinakos preguntaron por él.
Rudy cuenta con el apoyo de sus agentes, Andy Miller y Gerard Darnés, que trabajan en su salida. El General Manager de los Blazers, Rich Cho no quiere prescindir de Rudy, aunque ha buscado su traspaso a otra franquicia. Ahora queda la opción de negociar la rescisión del contrato -le quedan al menos dos años-, comprometiéndose a no regresar a la NBA con otro equipo, e incluso los Blazers podrían beneficiarse de un traspaso a un club europeo. La otra, es seguir en Oregón y prolongar su calvario.