Verano en Mallorca

Estas son las comidas que debes evitar si quieres reducir tu sudoración este verano, según la ciencia

Durante la época estival, cuando el sudor suele ser más intenso, es aconsejable evitarlos para mojar lo mínimo nuestras prendas

Queso

Los quesos curados pueden ser una mala opción si no se quiere sudar de más | Foto: Freepik

| Palma |

La sudoración es un proceso natural y esencial para el organismo, cuya función principal es regular la temperatura corporal mediante la eliminación de agua y electrolitos, especialmente sodio. Este mecanismo fisiológico, controlado por el hipotálamo, el centro termorregulador del cerebro, se activa cuando el cuerpo detecta un aumento en su temperatura interna.

Según expertos, el hipotálamo envía señales que provocan la sudoración para evitar el sobrecalentamiento. Sin embargo, existe una relación interesante entre la alimentación y este sistema nervioso, que, aunque no es categórica, sí podría explicar por qué ciertos alimentos incrementan la producción de sudor en muchas personas.

En temporadas con altas temperaturas, como ocurre en primavera y verano en España, es habitual experimentar un aumento en la sudoración, algo que se puede ver intensificado por la ingesta de ciertos productos alimenticios. A continuación, se detallan los cinco alimentos que más influyen en este fenómeno, según expertos y estudios recientes.

Café y

El consumo de bebidas con cafeína, como el café y el té, es uno de los factores que más contribuyen al aumento del calor corporal y la sudoración. La cafeína funciona como un potente estimulante del sistema nervioso, activando procesos metabólicos que incrementan el ritmo cardíaco y la temperatura interna.

Incluso cuando se ingieren frías y con hielo, estas bebidas provocan sudoración. Se recomienda, durante los meses cálidos, moderar la ingesta de refrescos con cafeína, que además suelen estar cargados de azúcar, lo que podría agregar un efecto adverso en la hidratación y la salud general.

Alimentos picantes

Los alimentos picantes como el chile, la pimienta, la cayena y el tabasco contienen capsaicina, un compuesto que genera una sensación de ardor y calor que nuestro cerebro identifica como un aumento real en la temperatura corporal. Este estímulo activa rápidamente el hipotálamo, aumentando la sudoración.

A diferencia de las bebidas calientes o sopas, que no tienen evidencia concluyente que las relacione con la sudoración, los picantes son un desencadenante probado. En verano, cuando el organismo ya está sometido a altas temperaturas, el consumo de este tipo de especias puede generar un incremento significativo en la producción de sudor.

Alcohol

El alcohol es otro alimento que puede provocar un aumento en la temperatura corporal. Su consumo dilata los vasos sanguíneos y eleva los niveles de glucosa, promoviendo así una mayor sensación de calor y sudoración. El cuerpo también trabaja intensamente para eliminar el alcohol, lo que contribuye a la pérdida de agua y electrolitos.

Es habitual observar que después de beber alcohol, especialmente de forma abundante, aparezca una sudoración excesiva durante la noche.

Grasas y quesos

Los alimentos con alto contenido en grasas, como los quesos curados, embutidos y frituras, requieren un mayor esfuerzo digestivo de parte del cuerpo, lo que incrementa la temperatura interna y la sudoración. Esta relación entre grasas y el sistema digestivo hace que se generen más calorías usadas en el proceso, y por ende, más calor corporal.

Para quienes disfrutan del queso, es recomendable optar por variedades menos curadas y con menos grasa, como el queso de Burgos o la mozzarella, que son opciones más ligeras y menos calóricas que el manchego u otros quesos intensos. Además, repartir las comidas en varias tomas y preferir platos ligeros ayuda a reducir el sobrecalentamiento y la sensación de pesadez.

Patatas fritas y alimentos hipercalóricos

Las patatas fritas, junto a otros alimentos hipercalóricos y ultraprocesados, demandan un esfuerzo metabólico elevado para ser digeridos, lo que también provoca un aumento de la temperatura corporal y la sudoración. Además, su bajo aporte en probióticos afecta la flora intestinal, que investigaciones recientes vinculan con la salud emocional y el bienestar del sistema nervioso.

Un intestino sano y equilibrado mejora la prevención de enfermedades neurológicas y ayuda a controlar estados de ansiedad y depresión, factores que también pueden influir indirectamente en la sudoración. Por ello, se recomienda aumentar el consumo de probióticos y limpiar la dieta para mejorar tanto la digestión como la regulación térmica.

1 comentario

user imtheone | Hace 11 días

El tabasco es una marca ... Qué clase de articulo es este ? Menudo el que lo ha escrito

Lo más visto