Palma conmemoró la conquista de la ciudad, por Jaume I, en 1229. La jornada comenzó con la colocación del Estendard Real de la Conquista de Mallorca y de la Cimera del Rei Martí en conmemoración de la entrada de las tropas de Jaume I en Palma. En la Catedral, se celebró una misa oficiada por el obispo de Mallorca, Javier Salinas.
Los regidores del Ajuntament de Palma, junto con el alcalde, Mateo Isern, sacaron el Estendard Reial a hombros y se dirigieron a la Catedral, escoltados por la Policía Local Montada, los Tamborers de la Sala, cossiers y cavallets de l'Escola de Música i Danses. Al llegar la comitiva a la plaza de Cort y tomando asiento las autoridades, se representó La Colcada de Pere d'Alcàntara, a cargo de Miquela Lladó y de los niños de la Escola de Música i Danses de Mallorca. Tras la representación, las autoridades políticas se dirigieron al salón de plenos de Cort. Allí se celebró el acto institucional de la entrega de las Medallas de Oro de Ciutat. Este año se distinguió a CineCiutat, Auditórium de Palma, la Associació de Lluita Antisida de Balears (Alas), Càritas, Creu Roja, a la nadadora Marga Crespí, campeona olímpica y mundial de natación sincronizada, y a Martí Mora, el primer mallorquín en defender la portería del Real Mallorca en la primera división del fútbol español, que recibió el galardón por su trayectoria.
Creu Roja fue distinguida por ser una ong que acumula 140 años de historia en Palma, que destaca por su generosidad, solidaridad y compromiso. Cáritas Diocesana mereció su medalla por ser una entidad católica que lleva más de 50 años impulsando la ayuda social en la ciudad. Bajo su paraguas se crearon en Palma el albergue de Can Pere Antoni, el comedor social del Temple, la Fundació Deixalles o el Projecte Home. La Associació de Lluita Antisida de Balears suma más de 25 años en la lucha por la prevención del sida. Joan Llull, al frente de la asociación, recogió el merecido premio. Cineciutat recibió la medalla de oro de Palma por ser una experiencia pionera en el sector audiovisual e impulsar el llamado cine culto, y fue Marta Pérez quien recogió la medalla de manos del alcalde Isern. El Auditórium de Palma, creado e ideado por la familia Ferragut, que suma ya tres generaciones dedicadas al impulso de la cultura en la ciudad, se ha convertido en un referente de la cultura local. El propietario del teatro e hijo del fundador, Rafael Ferragut, recogió la distinción. Asistieron al acto amigos, familiares y simpatizantes de las entidades y personalidades premiadas.