La Fundació Cultural Coll Bardolet de Valldemossa inauguró el pasado sábado una exposición que recoge obras del desaparecido pintor Joan Fuster gracias al préstamo de numerosos propietarios de obras del autor, nacido en Palma en 1870, y a la labor del Ajuntament, que se ha volcado en la preparación de este acontecimiento artístico.
El autor, muy vinculado a Valdemossa, desarrolló buena parte de su producción en esta localidad, llegando a ser conocido como es Pintor, malnom que incluso adoptaron sus descendientes desde entonces. Joan Oliver, comisario de la exposición y nieto del artista, destaca el amor de Joan Fuster por Valldemossa y su entorno natural y por la «bondad intrínseca de sus vecinos». Un creador que, en palabras de Miquel Alenyà, era «equilibrado, mesurado, respetuoso y modesto» y del que podemos disfrutar durante los meses de noviembre y diciembre en las salas de la fundación