–¿Usted recuerda qué le dijo el médico?–preguntó ayer en el juicio el fiscal a una mujer que denunció a un traumatólogo de Palma por un presunto delito de agresión sexual.
–Me dijo que me descubriera. Yo no lo entendía, pero accedí. Empezó a decirme que me quitase la camiseta, el sujetador... los pantalones, también. Me quedé en bragas y, finalmente, me dijo que me las quitara.
La mujer, que padece dolor en la columna desde que era niña, acudió a una clínica de Palma el 26 de abril de 2023 en busca de una opinión del reputado traumatólogo tras haber visitado a una veintena de especialistas. «Yo estoy muy desesperada por mis problemas de salud», dijo la denunciante, que vive «con fentanilo y morfina».
El médico, según explicó la paciente, le pidió que se desnudara y que realizara una serie de posturas. «Me quedé en shock, me bloqueé. Empecé a sentir que no era normal... llevo desde los 11 años, hoy [por ayer] cumplo 47 y jamás me ha pasado nada similar en la vida. No era normal que me dijera que me pusiera literalmente en pompa».
La denunciante relató que el traumatólogo le pidió que se tocara la punta de los pies y que ella le dijo que no podía. «Estuve seis o siete minutos totalmente desnuda delante suyo», aseguró la mujer que desde entonces no acude a médicos que sean hombres. «Era una posición muy bochornosa, es que es muy heavy, no reaccioné».
La mujer llamó «descompuesta» a su marido para contarle que el doctor le había pedido que se desnudara y que le iba a pedir fotografías en la próxima cita. «Yo no daba crédito a lo que me había pasado», concluyó.
El traumatólogo acusado declaró que solo le dijo que se tenía que descubrir la espalda. «No le dije que se tenía que quitar la ropa interior, yo me giré y ya no portaba ningún tipo de ropa». El médico, especialista en cirugía ortopédica y traumatología, comentó que la paciente no manifestó haberse sentido incómoda. «Es la primera vez que me veo en esta situación, en ningún momento se le conminó a desnudarse».
El director de la clínica señaló que abrieron una investigación contra el traumatólogo y que concluyeron que no hubo ningún tipo de prueba de que hubiera cometido algún delito. «Actuó conforme al protocolo».
El abogado de la mujer, Tomeu Salas, reclamó una condena de cuatro años de cárcel para el facultativo y que la indemnice con 30.000 euros por los daños morales. «Un traumatólogo no tiene por qué desnudar a la paciente».
El fiscal no acusó al entender que hay dudas de que los hechos ocurrieran como denunció la mujer. El letrado de la defensa, Eduardo Valdivia, pidió la absolución: «No existe nada más que la desnuda palabra de la denunciante».
Es una historia un poco rara, como mínimo....Por mucho traumatólogo que sea no me pongo en bolas y si no le parece bien me voy a otro