Los ocho miembros de una banda que cometió 28 robos en viviendas de la Isla han sido condenados a penas de dos años de prisión. El grupo tuvo una actividad frenética durante la pandemia. En apenas dos meses, entre septiembre y noviembre de 2020 asaltaron viviendas por media Isla, siempre de una manera similar. Alquilaban coches para desplazarse y, en grupos pequeños de tres o cuatro se dirigían a casas asiladas o chalés que desvalijaban a fondo.
Todos los acusados admitieron en el juicio que participaron en la trama y aceptaron una condena que, en todos los casos, será suspendida. Se benefician del retraso en la tramitación de la causa y de otro atenuante por reparación del daño al haber devuelto varios miles de euros a las víctimas. Cuatro de ellos pasaron varios meses en prisión preventiva, medio año en el caso del principal acusado, que además acumula varios antecedentes penales por delitos de robos.
Los ladrones saltaban muros y rompían ventanas para acceder al interior de las residencias en Palma, Inca, Marratxí, Campanet, Santa María, Costitx, Llubí o Campos. Intentaban hacerse con dinero, joyas y dispositivos tecnológicos, en ocasiones con notable éxito: el botín de uno de los robos consistió en 18.000 euros en efectivo y en otro de los casos obtuvieron varios Rólex y otros relojes de lujo. También intentaban llevarse los vehículos. En cuatro ocasiones emplearon para la fuga el coche del propietario de la vivienda, uno de ellos un Mercedes. La Guardia Civil recuperó todos los vehículos y buena parte del botín en la operación que acabó con los ocho acusados detenidos y que puso fin a las actividades del grupo.
El gusto por el motor también es parte del destino del botín. Uno de los acusados, según el relato de la Fiscalía con el que se ha conformado, adquirió un Audi A3 con los beneficios de los robos y otro, una motocicleta. Ambos vehículos fueron incautados. Inicialmente, la Fiscalía reclamaba condenas de cuatro y cinco años de cárcel para los encausados, unas condenas notablemente rebajadas tras una negociación con las defensas que desembocó en el acuerdo en el juicio. Inicialmente la vista tendría que haber durado más de tres días con la declaración de una treintena de víctimas.
CreusquetecrecUd. no ha pisado un juzgado en su vida. Robe en casa de un juez un rico o un político y ya verá su condena y la de estos. Las leyes son para los borregos pagaimpuestos.