Una mezcla entre El Grinch, el personaje de ficción que sustraía los regalos a la gente para fastidiarles la Navidad, y un Papá Noel malo, si esto fuese posible. Todo ello encarnado en un varón, marroquí de 37 años. Este martes fue condenado a un año, once meses y 29 días de prisión tras reconocer ante la jueza de lo Penal 5 ser el autor de al menos 15 robos en viviendas de Es Raiguer de Mallorca durante las pasadas fiestas navideñas.
Inicialmente la Fiscalía solicitaba para el acusado, que fue asistido por el abogado Miguel Ángel Ordinas, cinco años de prisión. Al varón se le apreció el atenuante de toxifrenia, ya que actuó bajo los efectos del alcohol y las drogas. El hombre, que cumplirá la pena, tendrá que abonar la responsabilidad civil de lo sustraído a los afectados, que asciende a 16.515 euros.
La mayoría de robos se produjeron en Nochebuena y Nochevieja y en varios de ellos con los moradores dentro, incluida en una ocasión una anciana de 100 años. Su voracidad delictiva se inició en un piso de Inca. De allí se llevó tres relojes, joyas y dinero en efectivo. Y eso que fue sorprendido por la moradora. El botín alcanzó los 5.000 euros. Posteriormente actuó en Santa Maria, Consell y Binissalem. La madrugada del día 24 cometió nada menos que cuatro robos, en los que consiguió hacerse con gran cantidad de objetos que las víctimas tenían preparados para para los regalos de Papá Noel. Horas más tarde, ya de mañana, entró en otra vivienda y se apoderó de un teléfono, una colonia y cremas. Todo ello también listo para entregar ese día.
Pero hubo más. Una segunda oleada. La inició la madrugada del día de Nochevieja. También se hizo con un importante botín de joyas, aparatos electrónicos y dinero en efectivo. El Área de Investigación de la Guardia Civil del Pont d'Inca lo detuvo, tras una intensa investigación, el 16 de enero. En su vivienda de Inca encontraron muchas joyas, una cuarentena de relojes y 35 móviles. Los agentes de la Benemérita localizaron a la mayoría de los propietarios y les devolvieron los efectos incautados al delincuente. Al resto tendrá que indemnizar en conjunto con 16.515 euros. La magistrada, dado el acuerdo de conformidad alcanzado antes de iniciarse la vista, dictó sentencia en el mismo acto.