Unos desconocidos han atacado, de nuevo, el radar de tráfico de la calle Pompeu Fabra, en la barriada palmesana de Son Oliva. Los vándalos pintaron de blanco el aparato y la Policía Local de Palma ya ha sido informada y se ha abierto una investigación.
No es el único radar atacado desde que el Ajuntament los instaló en distintos puntos de la capital balear. En la calle Miquel Lladó, que conecta el colegio de Madre Alberta con la rotonda de acceso a Son Vida, Son Quint y Son Xigala, también fue atacado en distintas ocasiones.
Incluso, llegaron a desmontar la caja que fotografía a los vehículos que se exceden de los 50 kilómetros por hora en aquel tramo. El Ajuntament lo reparó y poco después fue vandalizado de nuevo. Nunca se aclaró quién estaba detrás de los asaltos, pero fuentes policiales apuntaron a que podía tratarse de algún vecino indignado porque había sido sancionado.