Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado sábado en Palma a un joven de 22 años de edad por lanzar al responsable de seguridad de un local de ocio, morderle y amenazarlo de muerte. Cuatro días más tarde el agresor, que ya tenía en vigor una orden de alejamiento del local y de la víctima, regresó al lugar de los hechos y fue de nuevo detenido.
Los hechos iniciales ocurrieron el pasado sábado sobre las 02:00 horas de la madrugada cuando el joven quiso entrar en un local de ocio en Playa de Palma. El responsable de seguridad a sabiendas de que se trataba de una persona conflictiva, tal y como había demostrado en otras ocasiones, le negó la entrada. Ante la negativa, el detenido empujó al vigilante y cayó por las escaleras. Acto seguido le mordió la mejilla para después abandonar el lugar rápidamente. Minutos después regresó al local con una botella rota y amenazó de muerte a la víctima y a sus familiares. Volvió a escapar.
Tras el aviso, la Policía Nacional inició la búsqueda del agresor que fue localizado minutos más tardes. Ante las contestaciones incoherentes del joven, los agentes procedieron a su detención y horas más tarde pasó a disposición judicial donde se le decretó una orden de alejamiento de 500 metros tanto del local como del establecimiento. El pasado miércoles el agresor se volvió a presentar en el local de ocio donde fue nuevamente detenido por un quebrantamiento de la orden de alejamiento.