Un mujer fue condenada este martes en un juzgado de lo Penal de Palma a dos años de prisión y a seis sin poder ejercer la patria potestad sobre sus tres hijos menores –de 3, 7 y 11 años– tras reconocer que se los llevó a Francia en febrero de 2021 sin el permiso del padre, con el que compartía la custodia de los niños. La procesada, a través de videoconferencia desde el país galo, se declaró culpable de un delito de sustracción de menores.
Los hechos se remontan a agosto de 2020. La expareja de la imputada le dio permiso para que pudiera marcharse con los menores a pasar un mes en un pueblo de Granada. Cuando acabó dicho plazo la mujer le pidió al padre de los niños autorización verbal para quedarse en la Península que le fue concedido, teniendo en cuenta las restricciones de vuelos por la COVID-19. El asunto empezó a complicarse cuando en febrero de 2021, medio año después de marcharse de vacaciones, le dijeron al padre de los menores, que ha sido asistido por el abogado Monserrate Santandreu, que su exmujer se había ido a Francia con los niños.
La imputada hizo caso omiso a los distintos requerimientos judiciales para que retornara a los menores con su padre y cumpliera el régimen de custodia compartida. En octubre del pasado año un juzgado de Instrucción de Palma acordó la suspensión de la patria potestad y le dio un plazo de tres días para devolver a los niños a Mallorca. Pero ni así. No fue hasta diciembre de 2021, un año y cuatro meses después de irse de vacaciones, cuando hizo entrega de los hijos al padre y no en la Isla, sino en Barcelona.