La Policía Local de Palma ha denunciado a un establecimiento de la calle Comte de Barcelona, en Palma, tras recibir varias llamadas telefónicas por el alto volumen del local, así como por provocar perturbaciones del orden, dejar fumar a los clientes y menospreciar a los agentes, que acudieron al lugar vestidos de paisanos. Los hechos ocurrieron el domingo en torno a las 23.10 horas. Cuando los agentes de la Patrulla Verde llegaron al local, constataron que la música se podía percibir a decenas de metros del mismo. Según ha explicado la Policía en nota de prensa, al ver a los agentes, uno de los propietarios fue al DJ a pedirle que detuviera los aparatos musicales, pero el policía le indicó que volviera a encenderlos al volumen que estaban para proceder a medir el ruido.
El hombre desobedeció esta orden, dificultando de este modo la inspección. Además, el propietario, «con actitud beligerante», provocó en los clientes reacciones que perturbaron la seguridad de los policías, llegando a acometerse contra los mismos, que se habían identificado ya como agentes de la autoridad. Una vez solicitaron patrullas uniformadas, se procedió a identificar a las personas que habían cometido las perturbaciones, a los propietarios y al DJ para formalizar las denuncias correspondientes.
En total, se levantaron actas por obstaculizar la tarea inspectora, provocar perturbaciones del orden en el local, no disponer de seguro de actividad, menospreciar a los agentes, incumplir las condiciones de las licencias y permitir a los clientes fumar en la terraza.