Sexo salvaje en los baños de la Intermodal. Varias personas alertaron a los vigilantes de seguridad de la estación Intermodal de la presencia de dos jóvenes manteniendo sexo salvaje, con gemidos incluidos, en un baño.
Los vigilantes llegaron al lugar y tocaron a la puerta, pero los chicos no abrieron y siguieron manteniendo sexo. Al insistir de forma más contundente, abrieron el portón encontrándose a dos jóvenes -de una veintena de años- que reconocieron que estaban manteniendo relaciones sexuales. Se trataba de un español y un colombiano. El extranjero, bastante más joven y corpulento, mantuvo una actitud hostil con los vigilantes a los que llegó a agredirles.
Finalmente, la Policía Local de Palma se hizo cargo del altercado. Una vigilante sufrió lesiones en un dedo de su mano. Ambos dijeron que no eran chaperos y el sexo era gratis. Todo ello ocurrió el pasado viernes.
Por lo que contaba Cela, en tiempos del Caudillo los baños de las estaciones YA servían para eso. Lo que cambia es la falta de respeto a los agentes de seguridad.