Un prostíbulo de moda en Palma, ubicado en la barriada de Son Rapinya, fue cerrado en la madrugada de este sábado por agentes de la Policía Local que acudieron apoyados por técnicos de la conselleria de Salut y de Turisme. El negocio fue clausurado por no cumplir con la normativa contra la COVID.
Se trata de un club de alterne muy visitado y que está muy activo en las redes sociales, para captar clientes. Se ofrecen hasta 32 chicas distintas y los investigadores decidieron irrumpir por sorpresa.
Inspección
Sobre las cuatro y media de la madrugada, la comitiva formada por policías, técnicos y funcionarios entró en la casa e identificó a los responsables. En esos momentos no había demasiado clientes en el interior, aunque la Policía Local tenía información de que el trasiego últimamente era continuo.
Tras ser inspeccionadas las habitaciones y las zonas comunes, los agentes confirmaron que no se cumplía con las normativas sanitarias para evitar la propagación del coronavirus y procedieron a clausurar el establecimiento, por un tiempo que no ha sido especificado.
Fuentes de la investigación informaron que no había denuncias previas y que se trató de una intervención «de oficio», ya que habían detectado en internet que numerosos varones acudían de noche a aquellas habitaciones.
En los próximos días está previsto que otros prostíbulos de Palma sean revisados por los funcionarios policiales, para comprobar su estado. Esa, con todo, no fue la única inspección de ayer de madrugada en Palma. Dos locales de comida, uno marroquí y otro hindú, también fueron clausurados porque no respetaban la normativa en materia alimentaria.