El socorrista de Can Pastilla que arrolló a una mujer con su moto acuática ha sido condenado a una pena de seis meses de inhabilitación y a una multa por su actuación. El acusado reconoció en el juicio que cometió un delito de lesiones imprudentes y la empresa asumió el pago de una indemnización a la mujer, que se rompió cinco costillas como consecuencia del accidente provocado por el socorrista, que trabajaba contratado por una empresa privada.
El suceso ocurrió en septiembre de 2019. El socorrista vio a una mujer que hacía kitesurf y que había entrado en la zona de baño acotada en Can Pastilla. Fue a llamarle la atención con su moto acuática. Sin embargo, lo hizo a una velocidad excesiva y tampoco mantuvo la distancia de seguridad exigida. Sin siquiera detener la embarcación hizo un giro alrededor de la tabla en la que iba la perjudicada. Hizo que se cayera con esa maniobra y la mujer se golpeó contra la misma moto naútica. El impacto de la motocicleta provocó graves daños a la mujer que tuvo que ser tratada por un médico durante cerca de tres meses hasta que se recuperó de forma completa.
En el juicio se alcanzó un acuerdo entre las defensas de la empresa y del socorrista, la Fiscalía y la acusación particular que representaba a la víctima, ejercida por la abogada Gemma Rodríguez, del despacho Campaner Law. El acusado admitió el exceso de velocidad y el comportamiento imprudente y se le reconoce un atenuante porque entre él y la empresa abonaron parte de la indemnización a la afectada; el resto de la compensación corre a cargo de la compañía de seguros.