Un juzgado de Palma ha absuelto a una abogada acusada de revelación de secretos por aportar en un proceso de divorcio un correo electrónico que, supuestamente, había conseguido de forma ilegal su cliente.
En el juicio, que se celebró el pasado lunes, la víctima del delito perdonó a su exmarido, que estaba acusado de entrar de forma ilícita en sus cuentas de correo electrónico. Ese perdón supone una absolución automática del delito de descubrimiento de secretos. La sentencia, señala que las acusaciones no pidieron que esta persona declarara como testigo y que, por lo tanto, no hay prueba alguna de que accediera al correo personal de su exmujer ni que facilitara esa documentación a su abogada: «Sin la declaración de éste, no existe ninguna otra prueba ni directa ni indiciaria de que le hubiera comentado o comunicado a su abogada el mondo en que obtuvo el correo y mucho menos de que hubiera accedido al mismo de forma ilícita», señala la sentencia.
Además de esa falta de prueba, la magistrada avala la tesis de la defensa, ejercida por el abogado Jaime Campaner. El correo electrónico supuestamente robado fue enviado por el abogado de la exmujer a su cliente y la juez considera que «afecta a la confidencialidad entre el letrado y la cliente, pero no a la intimidad».
La Fiscalía reclamaba una condena de dos años de cárcel para la abogada acusada. La sentencia indica: «Se comparte con el ministerio fiscal la afirmación de que no todo vale y que existen unos límites éticos, pero la conducta de la acusada queda extramuros del ordenamiento penal».