El clan de ‘Los Chatarreros', conocidos también como ‘Los Extremeños', han visto mermado con la crisis el negocio de la recogida de chatarra. Por ese motivo, desde hace algún tiempo, han optado por ocupar inmuebles abandonados y cultivar marihuana en su interior. Así, los nuevos narcos, acceden a los pisos ‘al patadón' y una vez dentro se enganchan de forma totalmente fraudulenta a la electricidad y al agua.
A las 17 horas del pasado miércoles, bajo autorización judicial, los agentes del Grupo II de Estupefacientes en colaboración con la Policía Local de Palma procedieron al desmantelamiento de tres plantaciones de marihuana. Todas ellas estaban ubicadas en el mismo edificio. La entrada y registro tuvo lugar en la calle Santa Florentina, muy cerca de la plaza Fra Joan Alzina. En los últimos meses, los vecinos de la barriada se quejaban del aumento de venta de droga en la zona. Por ese motivo, la Policía Nacional decidió poner en marcha una campaña de ‘limpieza' en los principales puntos de venta y zonas más conflictivas.
Según fuentes oficiales, la actuación concluyó con la incautación de tres plantaciones de marihuana y de más de 500 plantas, las cuales arrojaron un peso de cerca de 112 kilos. Durante el operativo, también participaron técnicos de la compañía eléctrica que destacaron la peligrosidad que presentaba el cuadro de contadores debido a la gran cantidad de enganches ilegales existentes. Está previsto que en los próximos días se produzcan detenciones en esta operación.
Los narcos se pelean en el rellano
El rellano del edificio ubicado en la calle Santa Florentina donde la Policía Nacional localizó las tres plantaciones de droga se ha convertido en los últimos días en un auténtico ring de boxeo. Los agentes responsables del caso han detectado que con motivo de la gran cantidad de enganches ilegales a los contadores de la comunidad de vecinos, la red eléctrica principal se venía abajo en numerosas ocasiones. Por ese motivo, los narcos no dudaban en pelearse, llegando a las manos en algunas ocasiones, para repartirse de forma equitativa los enganches a la luz y así poder cultivar las diferentes plantaciones. En los próximos días, se desmantelarán más cultivos.