Las autoridades colombianas confirmaron este martes el feminicidio de Maira Alejandra Orobio Solís, una niña de 11 años que fue encontrada sin vida y con signos de tortura y violación en el municipio de Guapi, en el departamento del Cauca (suroeste).
«La administración municipal de Guapi repudia la violación, tortura y vil asesinato de la menor», dijo el secretario de Gobierno de Guapi, Teodoro Lerma, en un comunicado.
La menor, que residía en el barrio de Santa Mónica, hija de una «familia muy humilde», desapareció el pasado domingo, y fue abusada y asesinada esa misma noche, según el relato de las autoridades.
Lerma dijo a medios locales que la pequeña fue encontrada desnuda, con signos de tortura y abuso sexual, en un bosque cercano a su casa.
«El asesinato y violación de la niña Maira Alejandra Orobio Solís de 11 años (...) no puede quedar impune», aseveró el alcalde de Guapi, Plutarco Marino Grueso, en otro comunicado.
La Alcaldía ha instruido a la Policía para que investigue el crimen y capture a los culpables, y a la Fiscalía para que actúe con celeridad en la investigación.
Por su parte, el Instituto de Bienestar Familiar, que vela por la infancia y los jóvenes en Colombia, acompañó a la familia de la víctima, tras un hecho que consideran «que debe generar el rechazo e indignación de todos los colombianos».
En 2020, y según datos presentados por la Vicepresidencia, se produjeron en Colombia 150 feminicidios, una cifra que el Observatorio de Feminicidios de Colombia eleva a 568, sólo hasta noviembre.
Además, este mismo observatorio informó del asesinato en 2020 de al menos 53 menores de 18 años, de las cuales, más de una veintena eran niñas de menos de 14 años.