El Ajuntament d'Inca se ha convertido en el primer municipio de España en incorporar seguridad privada para reforzar a las plantillas de la Policía Local de Inca y de la Guardia Civil. Se trata de una medida pionera que está consiguiendo grandes resultados en los primeros días de su aplicación.
De hecho, el botellón en calles, plazas y parques ha quedado totalmente erradicado, como explicó Virgilio Moreno, alcalde de la ciudad. En la madrugada del jueves al viernes, un equipo de Ultima Hora acompañó a la Unidad de Seguridad Privada del Cuerpo Nacional de Policía, competentes sobre el control de los vigilantes de seguridad, en una de sus inspecciones.
Éxito
La misma resultó muy satisfactoria y se comprobó que el personal asignado estaba cumpliendo de forma escrupulosa el plan de actuación marcado por la delegación del Gobierno.
El inspector Alfredo Rodríguez, junto con dos integrantes más de unidad, se desplazó hasta Inca donde se entrevistó con los mandos de la Policía Local. Previamente, había informado a sus compañeros de la Guardia Civil de su presencia. Acto seguido, realizaron una minuciosa inspección por todos los puntos de vigilancia.
El Consistorio inquer incorpora vigilantes de seguridad, que de manera coordinada con la policía, realizan tareas de vigilancia y prevención por diferentes lugares del municipio. El refuerzo entra a las 21.00 horas y finaliza su servicio a las seis de la mañana, siempre y cuando no sean requeridos por el jefe de Policía Local. «De acuerdo con la situación actual, hemos considerado necesario reforzar la vigilancia en diferentes puntos del municipio para garantizar la máxima tranquilidad y seguridad de la ciudadanía», señaló el alcalde de Inca, Virgilio Moreno.