Sonia Vivas, regidora de Justicia Social, Feminismo y LGTBI del Ajuntament de Palma, ha interpuesto una denuncia en la Policía Nacional donde afirma ser víctima de amenazas «muy graves» contra ella y su entorno familiar. Se trata de la segunda regidora de Cort que acude a la policía para denunciar hechos similares.
En su escrito de denuncia, al que ha tenido acceso Ultima Hora, la podemita señala que: «En mi cuenta de Instagram @soniavivasriv3, a las 15.33 horas del lunes 6 de julio de 2020, recibe una notificación por parte de quien la ha etiquetado desde el perfil @jenmorgan1936, en el cual me menciona con la frase ‘me gusta ver que cada vez estás más sola'. Todo ello, a la vez que hace alusiones a mis padres y a mi hijo, junto a emoticonos de relojes y balanzas haciendo referencia a la justicia», apunta Vivas.
A continuación, siempre según el relato de la regidora en sede policial, comienza a recibir muchas más notificaciones en las que hace referencia a su condición de regidora. «Nunca sufriréis el daño que habéis causando. Vas a ser el orgullo de tus padres». En los siguientes escritos hace alusión a su familia (padres, hijo y expareja), mencionando detalles muy privados de los que muy poca gente tiene conocimiento. También recoge palabras o expresiones como «exterminio, te vas a quedar calva como aludiendo a la tensión que le van a crear y las constantes alusiones a su familia hacen que sienta temor a que les pueda pasar algo. Ya que ella está acostumbrada a que se viertan comentarios dirigidas a ella o a su condición sexual o a las denuncias que ha interpuesto contra miembros de la Policía Local de Palma, le hacen temer que pueda llegar a convertirse en víctima de algún episodio violento o que ella pueda ser objeto de algún tipo de denuncia falsa que pueda llevarla a prisión», consta en la denuncia.
Vivas, también sostiene que no dispone de indicios para poder afirmar de quien se trata, cree por comentarios realizados en alguno de los tuits recibido que podría ser alguno de los policías locales denunciados. «Creo que se trata del anuncio de un posible complot de denuncias para sentarme ante un tribunal, sufriendo desde hace unos tres años una persecución a base de denuncias, muchas de ellas cerradas por falsedad». Personada en dependencias policiales, la edil podemita recibió un mensaje, acompañado de una foto. Era su vecino de la puerta de al lado. En el mensaje le decía que, instantes antes, alguien había lanzado salsa de tomate ‘ketxhup' sobre su puerta. Ella sitúa los hechos en una franja horaria entre las 16.30 horas y las 18.30 horas.
Hace menos de una semana, su compañera de equipo de Gobierno, la socialista Angélica Pastor, regidora de Infraestructures i Accessibilitat del Ajuntament de Palma, interpuso una denuncia por amenazas telefónicas contra su persona. En aquella ocasión, la exregidora de Policía Local acudió a la Jefatura Superior de Policía Nacional, donde relató a los investigadores que, unas horas antes, se encontraba en el interior de un vehículo en compañía de unas amigas suyas. En un momento dado, siempre según el relato de la regidora, recibió una llamada telefónica. El interlocutor utilizó para hablar con ella un distorsionador de voz mientras le vertía amenazas y facilitaba información muy concreta. Es decir, dando a entender sin ningún género de duda que estaba siendo seguida. Pastor, en ese momento, activó la modalidad de manos libres y puso el altavoz para que sus amigas pudieran escucharlo y que a su vez le sirvieran de testigos.