La Guardia Civil detuvo este jueves en Cala Rajada a un hombre y una mujer por incumplir por agredir a un agente tras ser identificados cuando reparaban en la calle un vehículo sin respetar la distancia de seguridad de dos metros y sin portar la mascarilla, ha informado la Delegación del Gobierno este viernes.
Según la versión oficial, al proceder a identificar a los dos ciudadanos, estos se negaron, increparon a los guardias civiles y agredieron a uno de ellos, por lo que ambos fueron arrestados por un delito de atentado a agente de la autoridad.
Mientras, el aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma, registró ayer la llegada de 289 pasajeros, mientras que otros 317 salieron de Mallorca en los 14 vuelos que operaron, según los datos de la Guardia Civil. De los cuatro vuelos internacionales que llegaron a Palma que son controlados también por Policía Nacional y Sanidad Exterior, 23 personas tendrán que pasar el periodo de cuarentena de 14 días.
Por su parte, el aeropuerto de Ibiza recibió 175 viajeros en tres vuelos de entrada y otros 165 abandonaron la isla en tres vuelos de salida. Uno de los vuelos de llegada, procedente de Alemania, aterrizó con 10 pasajeros. El aeropuerto de Menorca contabilizó a 92 personas que llegaron y 126 se marcharon de la isla en seis vuelos programados.
La Guardia Civil denunció este jueves en el aeropuerto de Ibiza a un pasajero con destino a Barcelona y le impidió embarcar en el avión por no estar justificado su viaje y no cumplir los requisitos establecidos en el estado de alarma. Mientras, en el puerto de Formentera, la Guardia Civil levantó un acta administrativa por desobediencia a otro viajero que pretendía desplazarse en barco a Ibiza sin motivo justificado. También se le denegó el embarque.
Respecto a los controles realizados en las carreteras y otros puntos de la vía pública en Baleares, los agentes identificaron a más de 5.100 personas y 2.700 vehículos. La Guardia Civil identificó a la gran mayoría de conductores en los puntos de vigilancia activados en las islas.
Por último, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en coordinación con las Policías Locales del archipiélago, levantaron ayer 221 actas administrativas por desobediencia por incumplimiento de las restricciones del estado de alarma. Del total de las infracciones detectadas, 109 tuvieron lugar en Palma y 21 en Ibiza, según los datos facilitados por la Policía Nacional. Durante el periodo de estado de alarma, el archipiélago ha contabilizado más de 22.100 propuestas de sanción.
En Menorca, la Guardia Civil denunció ayer a tres mujeres por tomar el sol y bañarse en la playa de Cala Rafalet, en Sant Lluís. Y, en Mallorca, la Guardia Civil de Llucmajor levantó dos actas administrativas por desobediencia a dos hombres que no conviven en el mismo domicilio por circular en un vehículo por la zona de s'Arenal sin mascarilla.