El Covid-19 ha golpeado con fuerza el cuartel de San Fernando. De los 800 policías locales de Palma que conforman la plantilla casi 70 están a día de hoy afectados, de una manera u otra, por el coronavirus. De éstos, 16 agentes han dado positivo, 3 han sido hospitalizados y 2 permanecen en estado grave en la UCI.
Los datos se han conocido después de que el sindicato UGT presentara un escrito en el Ajuntament pidiendo que se mantuviera el sistema de horario en el turno de noche, vigente durante las dos primeras semanas del estado de alarma.
En su contestación, la Prefectura de la Policía Local explica en un gráfico «los agentes afectados por el Covid-19» y los desglosa de la siguiente manera: Se han controlado a 138 funcionarios y hay 69 policías que no trabajan, 41 que han firmado una declaración responsable para no ir al cuartel porque son de riesgo (aunque pueden teletrabajar), 38 con baja médica, 34 en cuarentena porque habían estado en contacto con contagiados, 3 en el hospital, 2 en la UCI y 15 positivos (el informe refleja 14, pero ayer se sumó otro caso). Otros 34 han dado negativos en las pruebas del Covid. Sin embargo,este viernes se actualizaron los datos y ahora hay en total 69 agentes afectados.
Los hospitalizados siguen siendo los mismos. Los policías se quejan de que no se están realizando test rápidos, que podrían agilizar las cosas. También hay mandos afectados por la nueva situación, aunque teletrabajan desde casa y participan en las reuniones de la junta de jefes. Desde que se decretó el confinamiento a nivel nacional, el cuartel de San Fernando ha adoptado medidas muy estrictas para evitar los contagios. Además, se han anulados vacaciones o días libres y todos los miembros disponibles están movilizados. Cuando se traslada a un detenido en un coche patrulla, se procede a desinfectarlo con bombas de ozono y los agentes tienen prohibidas las aglomeraciones dentro del cuartel.
Numerosos mandos de la Isla, diezmados por el Covid-19
La Policía Local de Palma no es el único cuerpo afectado por la pandemia. En la Policía Nacional y en la Guardia Civil tienen otros casos y algunos de sus más altos mandos han tenido que estar hospitalizados o de baja porque dieron positivo a la prueba del Covid-19.
Los funcionarios extreman las medidas de precaución y el número de detenidos ha caído en picado en el último mes, principalmente porque casi no hay movimientos por la calle debido al confinamiento.