La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha desestimado el recurso planteado por la defensa del empresario Bartolomé Cursach contra la sentencia que le condenaba a pagar 9.000 euros de multa y 3.000 de indemnización por llamar «subnormal» al juez Manuel Penalva.
La sentencia del juzgado de lo Penal consideró probado que el acusado dirigió en voz alta esa expresión en dos ocasiones a el día que fue a entregar su pasaporte tras quedar en libertad después de haber pasado más de un año en la cárcel por orden de Penalva. Ante Cursach y su abogado se encontraban varios funcionarios que escucharon la expresión. Poco después se lo dijeron al juez y éste denunció en el juzgado de guardia.
La defensa planteaba una serie de motivos formales para pedir la nulidad de la condena, entre ellos que la expresión no tenía que ver con la condición de magistrado de Penalva sino con una entrevista que este había concedido a la Cadena Ser. La Audiencia señala que no se puede desligar esa intervención del magistrado con su condición de instructor de las diligencias en las que estaba imputado Cursach. La Sala también valora la gravedad de las injurias por el contexto en que se produjeron y porque los hechos probados indican que se pronunció tres veces.
La representación legal de Cursach estudia plantear un recurso de casación ante el Tribunal Supremo contra esta sentencia.