El Ministerio de Perú ha confirmado este viernes la muerte de seis personas, entre ellos dos niños de 7 y 9 años, a causa de las quemaduras producidas por la deflagración generada por una fuga de gas de un camión cisterna en el distrito de Villa El Salvador, en Lima, la capital de Perú.
El accidente, que se produjo en torno a las 07.00 horas (hora local) de este viernes, ha afectado a varios edificios del distrito y además de las víctimas mortales, al menos 40 personas han sufrido heridas muy graves, tal y como han señalado las autoridades al afirmar que todos ellos tienen «un gran porcentaje de su cuerpo quemado».
Un equipo de hasta 13 unidades de bomberos se ha desplazado al lugar de los hechos para sofocar el incendio que la deflagración había provocado, y ya ha logrado apagarlo.
El ministro del Interior, Carlos Morán, ha informado de que al menos 150 personas han sido evacuadas de sus hogares como medida de precaución y de que serán reubicadas en instalaciones habilitadas para ello. El Gobierno ha agradecido la solidaridad del pueblo peruano, que ha acudido en masa a donar sangre tras el accidente.
El vehículo pertenece a la empresa Transgas que, según el periódico peruano El Comercio, ya protagonizó un episodio similar el pasado 23 de octubre de 2018 cuando uno de sus camiones sufrió una avería mecánica que provocó una fuga de gas que movilizó también varias dotaciones de bomberos.
Este mismo medio de comunicación ha revelado que el conductor del camión cisterna, Luis Palomino Guzmán, de 72 años, cuenta con un amplio historial de infracciones de tráfico, entre las cuales, 14 son de carácter muy grave.
En hasta en cinco ocasiones, Palomino Guzmán, quien se encuentra ingresado por inhalación de humo y será puesto a disposición de las autoridades en cuento sea dado de alta, ha sido multado por transportar material de manera insegura.
Al lugar del accidente han acudido distintas autoridades como la ministra de Salud, Elizabeth Hinostroza, o el alcalde de Lima, Jorge Muñoz.