El padre y la hermana de Diana Quer, Juan Carlos y Valeria Quer, han asistido este viernes a una de las sesiones más duras del juicio por este crimen, en la que se ha narrado cómo los agentes recuperaron el cuerpo de la joven del interior del pozo de Asados, unos momentos tras los que Juan Carlos ha asegurado sentirse «descompuesto».
Muy afectado, el padre de la víctima ha dicho en declaraciones a los medios, tras la primera semana de juicio, que «la realidad no se puede tapar». «Día tras día, este individuo está más cerca de pagar como debe lo que ha hecho con una niña indefensa, que podría haber sido su propia hija», ha apuntado Juan Carlos, que ha pedido que no se le aplique «ningún atenuante», dado que El Chicle «nunca ha tenido la intención de atenuar el dolor de la familia».
El padre de Diana Quer ha afirmado que «cuesta creer» que «haya personas que sean capaces de hacer lo que ha hecho» y ha criticado que la defensa de Enrique Abuín trate de apuntalar una supuesta colaboración con la justicia. «No se lo vamos a regalar después de 500 días de suplicio», ha sentenciado.
Sobre la actitud del Chicle, Juan Carlos Quer lo ha calificado de «un cobarde desalmado con niñas indefensas» e «incapaz de sostener la mirada», toda vez que el acusado no ha mirado en los momentos en los que las partes han visionado los vídeos de la recuperación del cuerpo.
«Son individuos inhumanos y nuestra sociedad tiene que tomar las medidas para que no salgan jamás si no están reinsertados en la sociedad», ha dicho el padre de Diana.
Juan Carlos Quer ha admitido que la jornada de este viernes ha sido especialmente dura. De hecho, su hija Valeria ha tenido que abandonar la sala tras la declaración del primero de los buzos que ha intervenido y las revelaciones de esta sesión le han causado una afectación tan fuerte que ha tenido que ser atendida y trasladada por personal sanitario desde el propio edificio judicial.