Macarena es socorrista de Can Pere Antoni. Este pasado sábado, tras acabar su jornada laboral, decidió quedarse en la playa jugando a vóley con unos amigos. En un momento dado, vio que un niño tenía problemas en el mar, que estaba muy movido.
Rápidamente, se metió en el agua y nadó hasta él. El niño, que luchaba contra la corriente para no ahogarse, se desmayó. Macarena lo cogió y llegó hasta una boya, donde permaneció hasta que el pequeño recuperó la conciencia.
Una lancha de salvamento acudió a rescatarlos, pero, debido a que las condiciones del mar eran muy complicadas, no pudieron subirles a la embarcación. Le lanzaron un salvavidas a Macarena y le indicaron que debía volver a la orilla remolcando al niño.
Finalmente llegaron a la orilla sanos y salvos.