Un teléfono móvil y 20 euros fue el botín por el que unos atracadores apalearon brutalmente en Magaluf a un jugador de críquet de la liga inglesa, que pasaba unos días de vacaciones en Calvià. Travis Key tuvo que ser hospitalizado a causa de las graves lesiones que sufrió.
El joven, de 21 años, estuvo de fiesta con sus amigos el pasado lunes y de madrugada decidió regresar solo a su hotel. Sus compañeros se quedaron en un bar y él se adentró en una calle. El deportista, entonces, se vio rodeado «por cinco o seis hombres» que le dieron una paliza y se apoderaron de su teléfono móvil y de 20 euros.
Travis, australiano de nacimiento y portero del equipo Bomere Health de Shrewsbury, quedó tendido en el suelo y perdió cinco dientes. Además le rompieron la mandíbula por cuatro sitios distintos, le fracturaron un brazo y le provocaron hematomas en el cerebro, que se hinchó peligrosamente. Travis pasó dos días en el hospital y el jueves regresó al Reino Unido. Ahora se está recuperando en su casa después de una operación en la mandíbula en el Princess Royal Hospital de Telford.
El joven elogió a los médicos que lo habían tratado: «Todo ha ido mejor de lo planeado y después de un trabajo increíble de los cirujanos, ahora estoy de vuelta», explicó a los medios de comunicación británicos. Sin embargo, es consciente de que su recuperación será larga: «Pero al menos ya no tendré esos dolores» en su maltrecha mandíbula.
La Guardia Civil ha abierto una investigación para detener a los agresores de Travis. Este verano se están disparando los incidentes en Punta Ballena y sus alrededores, a pesar de que los agentes montan operativos continuos de vigilancia.