El juzgado de lo contencioso administrativo número 1 de Palma ha ordenado que el Ajuntament de Palma que readmita como comisario a Miquel Pericás, que fue cesado por el actual equipo de Cort en febrero del año pasado.
La concejala Angélica Pastor ordenó el cese de Pericás tras apartar del cargo a los comisarios Mut y Morey, y cuando el comisario Cabellos estaba a punto de jubilarse, lo que dejó descabezada a la cúpula policial de ese momento. La Administración alegó que el cese de Pericás se debía a que era comisario en comisión de servicio y que éstas están sujetas «a unos motivos y a una temporalidad».
El día 6 de julio se presentó en el juzgado el recurso contencioso administrativo de Pericás, que sostenía que la medida contra él era ilegal. El día 1 de septiembre la demanda fue admitida a trámite y la vista quedó fijada para febrero. Miquel Pericás alegó que no había causa para acordar el cese como comisario en comisión de servicio y que el motivo alegado por la Administración «constituye una desviación de poder, con el fin de tener que ofrecerle el nombramiento de la Jefatura de la Policía Local». En la resolución se recuerda que el mayor Bravo, que fue jefe del cuartel tras el cese de Pericás, «ha declarado que la jefatura le hubiese correspondido al Sr. Pericás porque en ese momento era el único comisario, pero que recibió una llamada de la concejal manifestándole que el alcalde le iba a nombrar a él para el cargo, pero que para eso tenía que cesar al Sr. Pericás».
La regidora Angélica Pastor y el exdirector del Área, Martí Capó, declararon en sede judicial que cuando entraron en el equipo de Gobierno revisaron todos los nombramientos «y se detectaron irregularidades», entre ellas que el nombramiento de Pericás como comisario en comisión de servicio «no estaba fundamentado y, por tanto, había que cesarle». La sentencia del juzgado anula «por desviación de poder» la resolución impugnada «y condeno a la Administración demandada a reintegrar al recurrente la pérdida de las retribuciones sufridas por la diferencia entre las retribuciones íntegras como comisario y las que percibe como mayor desde el cese hasta la efectiva reincorporación». Las costas procesales se imponen también a la Administración.
Guillem Mascaró también gana su recurso tras ser cesado como mayor del Cuerpo
Nuevo revés para el Ajuntament de Palma. El comisario Pericás no fue el único que presentó un recurso administrativo contra su cese. El mayor Guillem Mascaró, que llegó a ser director de Área tras la dimisión del exintendente Vera en la época de Mateo Isern como alcalde, continuó como mayor interino cuando el nuevo equipo de Gobierno entró en Cort, pero después fue cesado y volvió a su categoría de subinspector.
Sin embargo, Mascaró presentó una demanda en lo contencioso administrativo y recientemente la ha ganado, por lo que tienen que reponerle en su antiguo cargo. De momento no ha trascendido dónde ubicará el comisario jefe Palouzié al comisario Pericás y al mayor Mascaró.