La Policía Local de Almería ha detenido a dos hombres de 44 y 43 años acusados de maltratar y retener contra su voluntad en una vivienda de la capital a una mujer, a quien los agentes encontraron tendida en el suelo boca abajo, amordazada con bridas en sus muñecas, y con un trapo más una bolsa de plástico comercial tapándole la boca.
En el momento de la intervención, uno de los detenidos estaba encima de ella mientras que el la sujetaba por el cuello contra el suelo, donde había restos de sangre. La víctima, de nacionalidad uruguaya y de 44 años, pudo ser liberada gracias a que unos vecinos escucharon sus voces y «gemidos» pidiéndo auxilio.
Hechos
Según ha indicado el Ayuntamiento de Almería en un comunicado, los hechos ocurrieron sobre las 18,30 horas del jueves cuando la patrulla, que realizaba funciones de Seguridad Ciudadana, fue requerida por la Sala del 092 para que se personara en la vivienda situada en el número 38 de calle Quesada, en el barrio de El Zapillo, porque una llamada aseguraba que había escuchado a una mujer pidiendo auxilio.
Personados en el lugar, los agentes se identificaron como policías y comenzaron a llamar a la puerta, al tiempo que escuchaban el sonido de un televisor al que acababan de subir el volumen. Aunque nadie respondió a los requerimientos policiales, los agentes sí escucharon a alguien tratando de pedir ayuda utilizando gemidos, al tiempo que un vecino de una calle aledaña advertía a los funcionarios de que alguien se iba a escapar por el balcón, por lo que ambos se trasladaron al domicilio de éste y a través de un patio interior subieron a la azotea.
Allí localizaron visiblemente nervioso al posteriormente identificado como Marcos C.L., uno de los detenidos, quien les indicó que no pasaba nada y que no les iba a abrir la puerta.
En vista de que parecía haber alguien en peligro en el interior de la vivienda, los agentes se dispusieron a acceder al interior de la misma saltando desde el balcón de un domicilio colindante al de la casa en cuestión, que tenía el ventanal abierto.
Una vez dentro, se encontraron a una mujer tendida en el suelo boca abajo, amordazada con bridas en sus muñecas, los brazos hacia delante y un trapo tapándole la boca, estando encima de ella otro individuo que la sujetaba por el cuello contra el suelo, donde había restos de sangre. De inmediato, apartaron a quien resultó ser Fernando M.S., otro de los detenidos, y al hacerlo cayó al suelo un cuchillo de cocina.
Tras asegurar la zona y asistir a la víctima, quien además del trapo tenía en la boca una bolsa de plástico comercial, abrieron la puerta de acceso al resto de efectivos policiales que habían sido avisados de lo ocurrido.
La mujer manifestó a los agentes que había visto un anuncio de trabajo con alojamiento de camarera, que fue a una supuesta entrevista de trabajo en la que se presentó Marcos C.L., con quien se dirigió al domicilio donde fue encontrada, ya que supuestamente allí estaba la oficina, y una vez allí el otro detenido se abalanzó sobre ella, la tiraron al suelo y la ataron.
«Satánicos»
A pesar de la resistencia que opuso, consiguieron amordazarla. Una vez en el suelo, según la víctima, comenzaron a mostrarle unas hojas con dibujos, al parecer satánicos, que posteriormente fueron encontradas por los agentes. En las mismas aparecían calaveras y textos apocalípticos.
Los detenidos, de nacionalidad uruguaya y española, han sido trasladados a las dependencias de la Comisaría Provincial, donde se iniciaron las diligencias pertinentes por delitos de detención ilegal y malos tratos.
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Almería, presidida por el alcalde, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, ha aprobado este viernes una felicitación expresa a los dos agentes de la Policía Local que liberaron a la mujer.