Un centenar de personas se concentraron a última hora de la noche del domingo para rendir homenaje a David Grimaldos González, el joven fallecido el año pasado en la fiesta de los quintos de Bunyola.
El acto tuvo lugar a las diez de la noche en el Passeig Antoni Esterellas, junto a la farola en la que Grimaldos murió electrocutado. Los asistentes encendieron 365 velas, una por cada día transcurrido desde el trágico accidente, y lanzaron dos bengalas al cielo.
Varios amigos y familiares de la víctima mortal, que contaba con 18 años de edad la noche del siniestro, lucieron camisetas con mensajes recordando la memoria del fallecido. Para la ocasión, se habilitó un servicio de autobús para trasladar a los vecinos de La Soledat hasta Bunyola.
David Grimaldos González, el joven fallecido, acudió el pasado 31 de agosto de 2014 a la verbena que organizaban los quintos de Bunyola en compañía de varios amigos. El suceso tuvo lugar sobre las 00.30 horas de la madrugada frente al número 21 del Passeig Antoni Estarellas, que es la calle que cruza el pueblo. El joven se acercó hasta la farola que se encuentra sobre un poyete de marés de un metro de altura, se subió sobre el mismo y cuando se agarró a la farola se quedó enganchado.
Y lo peor de todo no ha habido ningún responsable en asumir la culpa, todavía aun dándose un paseíto por Palma y pueblos de la isla seguiremos viendo mas de una farola y algún que otro contador sin tapa de protección...