«Subid, subid al tercero que están armando follón». Un hombre que ‘ayudó' a la policía en la entrada de un edificio de Palma donde se había registrado un caso de malos tratos resultó ser el agresor y, tras engañar a los agentes, aprovechó para escapar. No obstante poco después fue localizado y detenido por un presunto delito de lesiones en el ámbito familiar.
El suceso tuvo lugar en la madrugada del sábado al domingo en un bloque de viviendas de la calle Son Nadalet, en la zona de la Soledat. La Policía Local fue alertada de una pelea en un piso y una patrulla se dirigió al lugar. Cuando llegaron encontraron a un hombre en el portal de entrada, el cual les dijo efusivamente que subieran al tercer piso porque allí se producía el incidente.
Una vez en el piso, los agentes vieron que la puerta principal estaba violentada y había desorden en el interior. Al entrevistarse con la víctima, de 45 años, esta les indicó que su marido había llegado borracho a casa, había aporreado la puerta de la vivienda, empezó a gritar sin motivo alguno, la agredió, rompió muebles y tiró electrodomésticos al suelo.
La mujer presentaba lesiones en la cara, concretamente una inflamación en la zona frontal y le salía un hilo de sangre por la nariz.
El hijo de la mujer, de 24 años, se encontraba en la casa y al presenciar la agresión defendió a su madre. A causa del alboroto los vecinos llamaron a la policía. Cuando la mujer y su hijo facilitaron la descripción del varón, de 44 años, los agentes se dieron cuenta de que era el individuo que se habían encontrado en el portal. Por ello dieron una batida por la zona y lo arrestaron.
La mujer y su hijo se negaron a presentar denuncia. Ella dijo que discutía frecuentemente con su marido, pero era la primera vez que la agredía. El hijo corroboró esta versión. La policía constató que no había denuncias previas pero actuó de oficio.