La Audiencia de Palma juzgará la próxima semana a un hombre acusado de abusar sexualmente de sus hijas, haciéndoles tocamientos con ánimo libidinoso desde que las niñas tenían 2 y 4 años de edad, para quien la Fiscalía pide una condena de 20 años de prisión.
El hombre se prevalió de la circunstancia de que desde 2003, cuando él tenía 35 años, era el único progenitor custodio de las dos niñas para realizarles continuos tocamientos, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía.
Desde marzo de 2007, el hombre tiene prohibido acercarse a las menores, cuya custodia asumió el Consell de Mallorca.
El ministerio público considera al hombre responsable de dos delitos continuados de abuso sexual y pide para él una condena de 10 años de cárcel por cada uno de ellos.
Reclama además que se le prohíba aproximarse o comunicarse con sus hijas durante 15 años, así como que las indemnice con 30.000 euros a cada una de ellas por el daño moral causado.
El juicio tendrá lugar ante la sección primera de la Audiencia de Palma el lunes y el martes.