Drama en el municipio de Sóller. Una mujer de 45 años, identificada como Rosa María Martínez Deyá, perdió la vida ayer tras ser asfixiada por su expareja, Jaume Mayol, de 48 años, en el segundo crimen de violencia de género del año registrado en Mallorca.
Sobre las 15.15 horas saltaban las primeras voces de alarma. El hermano del agresor llamaba a los equipos de emergencias y les comunicaba que al llegar a la finca familiar ubicada a las afueras de Sóller, se había encontrado a su hermano y a la expareja sentimental de éste muertos, tendidos en el suelo y ensangrentados.
Rápidamente, agentes de la Policía Judicial de Calvià, Policía Local de Sóller y personal sanitario del SAMU-061 y del PAC de la localidad acudieron al lugar del suceso.
Finca
El crimen se produjo en la finca Can Prohom, junto al Camí de Castelló, en la carretera de Sóller a Deià a la altura del kilómetro número 5, muy cerca del agroturismo de Son Bleda.
Sobre las siete de la tarde, una comitiva judicial llegaba al lugar y se procedía al levantamiento de los cadáveres. Durante toda la tarde se vivieron escenas de nerviosismo, especialmente en la zona donde la Guardia Civil montó el cordón policial y se concentraron algunos familiares y amigos de los fallecidos.
Investigación
Según las primeras hipótesis de la investigación, Jaume Mayol golpeó en varias ocasiones a su expareja, la maniató y amordazó para después asfixiarla con sus propias manos. Acto seguido, cogió un arma de fuego y se quitó la vida.
Los servicios de emergencias desplazaron un equipo psicológico, a petición del SAMU-061, para atender a las dos hijas menores que la pareja tenía en común.
Al parecer, los dos fallecidos se habían separado hacía aproximadamente un mes y la relación entre ambos no era buena. Tras la separación ella se había ido a vivir con una prima. La pareja tenía dos niñas de 12 y 8 años, que estaban en casa de un familiar cuando se produjo el crimen.
Se trataría del segundo caso de violencia de género registrado este año en Mallorca. El primero se cobró la vida de Olha Yuriyiuna Filatova, ucraniana de 39 años. Murió a manos de su marido, Dimitri I., ruso de 29 años, en Son Bauló.