La Audiencia Provincial ha ratificado la condena impuesta a un profesor de música de Palma por abusar de una alumna a la que daba clases particulares de flauta. El tribunal deja la condena en año y medio de prisión y rebaja en seis meses la condena que ya había impuesto un juzgado de lo Penal de Palma.
La sentencia señala como probado que el acusado, un hombre de 45 años de edad, aprovechó que la menor sufría una contractura para ofrecerse a darle masajes y propasarse durante los mismos. La víctima, que tenía entonces quince años, estaba «paralizada de temor y asustada por el respeto que le infundía su profesor». Los hechos arrancan en la primavera de 2010 cuando por falta de aulas en el colegio, el acusado comienza a impartir las clases particulares a la menor en su propio domicilio.
Contractura
La víctima sufría una contractura en la espalda y el profesor se ofreció a darle masajes que desembocaron en un episodio en el que el acusado la pidió que se desnudara y que se pusiese un antifaz para manosearla. La víctima contó lo ocurrido a sus padres esa misma noche y los hechos fueron denunciados.
La defensa del profesor alegó ante la Audiencia que no había una intención sexual en el comportamiento del acusado. La sentencia rechaza este argumento por las circunstancias de ese último masaje y ante la extrañeza de que un profesor de música se dedique a dar masajes o que no se diera ningún tipo de información a los padres de la menor.
La rebaja en seis meses de la pena que se había impuesto responde a que la Audiencia considera que se produjo un único delito de abusos y que estos no fueran continuados. Así, señala que los primeros masajes que el profesor dio a la víctima tenían como intención preparar el abuso real. No obstante le impone la pena más alta posible por este delito.