Tres atracadores sudamericanos propinaron en la madrugada de ayer una brutal paliza a un peatón y le rompieron la mandíbula a golpes, en la calle Industria. Después, le robaron el dinero de la cartera y se dieron a la fuga. La víctima tuvo que ser hospitalizada, con lesiones de carácter grave, y los médicos estimaron que su recuperación podía durar hasta medio año.
Sobre las tres de la madrugada, las centralitas telefónicas del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local fueron alertadas de que un hombre se hallaba tendido en el suelo, en la calle Industria, y que sangraba de forma abundante.
Conmocionado
Cuando los agentes llegaron a esa dirección, cerca ya de la calle Libertad y del cuartel de San Fernando, el herido estaba conmocionado. No podía hablar y no se sostenía en pie. Los médicos del 061 le proporcionaron las primeras curas y el hombre, con señas, explicó que habían sido tres los asaltantes. Con mucha dificultad, añadió que se trataba de sudamericanos que lo habían rodeado y le había propinado una auténtica paliza. Algunos de los puñetazos y patadas le impactaron en la mandíbula, que al parecer quedó fracturada por distintas partes.
Los ladrones se llevaron el dinero de su cartera y parece ser que también su teléfono móvil y después se dieron a la fuga corriendo. Se trata de una calle muy transitada por coches patrulla del 092, que salen o regresan del cuartel, por lo que llamó la atención a los agentes que los tres atracadores actuaran en plena vía.
La víctima, de mediana edad, fue trasladada en ambulancia hasta un centro hospitalario, donde tuvo que ser intervenido de urgencia.
De forma paralela, el CNP y la Policía Local se desplegaron por las calles colindantes con Industria y montaron una operación cerrojo, para localizar a los implicados. Todo apunta a que los tres sudamericanos se separaron para no llamar la atención y después de una batida de más de una hora no se halló ni rastro de ellos.
La investigación, sin embargo, continúa y el caso ha pasado a manos del Grupo de Atracos de la Jefatura de Palma. A la víctima le mostraron fotos del álbum de sospechosos habituales y también se están revisando cámaras de la zona por si quedaron grabados.