Un hombre de 62 años aceptó ayer una pena de 17 años de cárcel por haber abusado sexualmente en varias ocasiones de su ahijada y una amiga de ella, cuando contaban con once y diez años de edad, respectivamente. Los abusos se produjeron entre junio y octubre de 2008.
La Fiscalía solicitaba inicialmente 35 años y medio de prisión para el procesado, Andrés P.F., pero al declararse éste culpable de los hechos se rebajó la petición de condena a 17 años de prisión, concretamente a dos penas de 8,5 años por sendos delitos de abusos sexuales.
Ahora el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma dictará la sentencia que recoge los hechos probados con la citada pena de prisión.
El condenado tenía una gran amistad con la familia de una de las víctimas, que lo hizo padrino de bautismo de la menor. Aprovechándose de esta confianza abusó de la niña cuando tenía once años y de una amiga de ella, que tenía diez. El condenado las llevó a su casa varias veces, donde les puso películas pornográficas, las sometió a tocamientos, les hizo fotos semidesnudas y se masturbó delante de ellas, además de someterlas a todo tipo de vejaciones. También abusó de ellas en varias ocasiones en el cine. Para que no contasen nada y fuese descubierto, les daba dinero y les compraba regalos y chucherías, aunque finalmente se descubrieron los hechos.