El incendio que ha afectado a una amplia zona de pinar en Cala Benirrás, Ibiza, ha sido dado por «estabilizado» esta tarde, que es el paso previo a declararlo controlado, según ha informado a los medios de comunicación el presidente del Govern balear, Francesc Antich.
Antich ha hecho estas declaraciones tras sobrevolar la zona del incendio, que se declaró el pasado domingo a las 17:30 horas por una negligencia ocurrida en una cueva próxima a la cala y no por la explosión de ningún vehículo como se apuntó inicialmente.
«El término estabilizado es el paso previo a estar controlado y quiere decir que tal como tenemos la situación allí arriba, tenemos los medios necesarios para que, si hubiese algún rebrote, poder controlarlo de inmediato», ha detallado el presidente.
Antich ha precisado la superficie del incendio y ha señalado que, en una primera medición del perímetro, los técnicos han determinado que ha afectado a 349 hectáreas, aunque inicialmente se habían estimado unas 400.
Una semana para apagarlo totalmente
Los técnicos terrestres tardarán una semana en apagar definitivamente todos los focos del incendio originado este domingo en la cala ibicenca de Benirràs, una vez sean controladas las llamas, algo que se espera que se produzca de forma rápida, dado que el fuego ya ha sido estabilizado.
Así lo han informado a Europa Press fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente y Movilidad, que han anunciado que hasta dentro de 20 años, la zona natural protegida de Benirràs, ubicada en el municipio ibicenco de Sant Joan de Labritja, no recuperará la normalidad, tras haber afectado el fuego a 349 hectáreas, si bien no todas ellas han sido calcinadas totalmente.
En este sentido, han recordado que hace 20 años esta zona también sufrió otro incendio y, hasta ahora, los pinos no habían comenzado a tener una altura considerable. Precisamente, el gerente del Instituto Balear de la Naturaleza, Guillem Rosselló, ha desvelado que, como consecuencia del incendio, habrá que esperar 15 años para que los pinos que se planten estén a dos metros de altura.
Así, ha subrayado que, una vez finalicen las tareas de extinción, lo más importante será retirar toda la superficie quemada para que pueda volver a reforestarse esta zona natural de Ibiza, protegida por el Govern a principios de esta legislatura.
Por otro lado, las citadas fuentes han desvelado que todos los esfuerzos de los medios aéreos y los técnicos terrestres están centrados en estos momentos en apagar el foco más activo, que se dirige hacia Cala Xarraca, ubicada al este.
Así, actualmente, están trabajando en esta zona 17 medios aéreos, uno menos que esta mañana, dado que un 'Canadair' ha regresado a Mallorca, con el fin de estar disponible, en caso de que se produzca algún incendio en la isla.
Los aviones y helicópteros permanecerán extinguiendo las llamadas hasta que desaparezca la visibilidad a última hora de esta tarde, de forma que volverán a operar este miércoles con los primeros rayos del sol. Por su parte, al igual que la pasada noche, los 300 técnicos terrestres, entre ellos, 103 de la Unidad Militar de Emergencias, permanecerán esta noche, por turnos, con el fin de lograr controlar el incendio.
Por su parte, el presidente del Govern, Francesc Antich, y el conseller de Medio Ambiente y Movilidad, Gabriel Vicens, continuarán en Ibiza coordinando las labores de extinción, hasta que el fuego esté finalmente controlado. Asimismo, ha llegado a la isla el presidente del Consell de Ibiza, Xico Tarrés, quien ha tenido que interrumpir sus vacaciones.
En total, están actuando en la zona unas 300 personas -150 de las cuales trabajan en primera línea del incendio- pertenecientes a los Bomberos del Consell Insular de Ibiza, Emergencias, Protección Civil, la Guardia Civil, la Conselleria, y la UME, entre otros organismos.
Fruto de una negligencia
El conseller de Medio Ambiente y Movilidad, Gabriel Vicens, ha revelado que el incendio originado este domingo en la cala ibicenca de Benirràs fue provocado por una negligencia en una cueva cercana a la zona en la que se encontraban los coches estacionados y, por tanto, no fue la explosión de uno de estos vehículos lo que causó las llamas, tal como se pensó en un principio.
Así, alrededor de la citada cala, ubicada en la localidad ibicencia de Sant Joan de Labritja, hay varias cuevas en las que reside una comunidad hippy y fue en una de ellas en las que se produjo la citada negligencia que provocó el incendio, que ha calcinado ya cerca de 350 hectáreas.
Por primera vez en Baleares, en el incendio de Benirràs se ha declarado un nivel 2 de incendio al afectar el fuego a núcleos habitados y a una importante concentración de personas en el momento en el que se declaró el fuego.
Así, el director general de Biodiversidad, Vicens Vidal, ha explicado que cuando se decreta este nivel, la prioridad pasa a ser la seguridad de las personas por delante de la propia extinción del incendio.