El fiscal sube de 14 a 28 años su petición de cárcel para el líder vecinal de Pere Garau por abusos

V. MALAGÓN
El fiscal Julio Cano elevó ayer de 14 a 28 los años de cárcel que solicita para el ex dirigente vecinal de Pere Garau acusado de abusar de seis menores. El Ministerio Público ha elevado su petición dado que en un primer momento calificaba todos los abusos como un único delito continuado y ahora solicita una condena por cada uno de ellos. El más grave es una violación de la que habría sido víctima una de las menores, cuando tenía once años, a la que el acusado habría introducido un dedo en la vagina al menos en una decena de ocasiones.
El relato de hechos que realiza el fiscal no se aparta en lo sustancial de su primer escrito. El acusado, como directivo de la asociación cultural de Pere Garau conoció a las menores a través de las distintas actividades que se hacían en el centro. A partir de ahí, entabló una relación de confianza con ellas. Las propias menores, como pusieron ayer de manifiesto las acusaciones particulares, declararon que «adoraban» al acusado. En varias ocasiones, el líder vecinal manoseaba a las niñas y llegó a obligar a alguna de ellas a que le tocaran sus partes.
El abogado defensor, Jaime Campaner, insiste en la inocencia de su representado. En su informe, el letrado incidió en los cambios que se han producido en las versiones de las niñas. En algún caso, las menores incurrieron en contradicciones sobre aspectos de los abusos y en elementos como el momento en el que éstos se produjeron. El abogado sostiene que estos cambios hacen que los testimonios de las menores, principal prueba de cargo contra su cliente, no sean suficientes como para que éste sea condenado.
Las acusaciones particulares consideran suficientemente probados los hechos. Los letrados que representan a las niñas incidieron en que durante el juicio no se ha acreditado ningún tipo de motivo que justifique una posible denuncia falsa, como un móvil económico.
Antes del trámite de informes, los peritos de los juzgados y la propuesta por la defensa volvieron a colisionar sobre si las declaraciones de las niñas son o no son creíbles.