Eran las 00.45 horas de ayer cuando varias llamadas alertaban a los cuerpos de seguridad que en la calle Reyes Católicos de Palma, a la altura del número 140, un joven marroquí estaba violando a una mujer.
Rápidamente acudieron hasta el lugar de los hechos varias dotaciones del GAP (Grupo de Atención Preventiva) y de la Unidad Nocturna, todos ellos de la Policía Local de Palma, agentes del Cuerpo Nacional de Policía y una ambulancia medicalizada del 061.
A su llegada, los equipos de emergencia localizaron a una mujer de unos 40 años de edad medio desnuda entre dos coches.
Mientras los policías tomaban declaración a varios testigos presenciales, los facultativos atendían a la víctima y la trasladaban hasta un centro hospitalario.
Numerosos testigos facilitaron a los policías una descripción muy explícita del presunto agresor. «Ha sido un chico joven, de unos 20 años, vestía pantalón vaquero, chaqueta roja, de un metro ochenta, aproximadamente y moro», comentaba un testigo a la policía.
Minutos más tarde, las centralitas de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía, radiaban por su emisora la descripción del sospechoso. A partir de ese momento se inició una exhaustiva batida por los alrededores.
Fruto de la misma, en la inmediaciones del número 36 de la calle Indalencio Prieto, sita en la barriada de Son Gotleu, dos motoristas del GAP (Grupo de Atención Preventiva) de la Policía Local, avisaban por radio: «Tenemos a un sospechoso que coincide plenamente con la descripción».
En cuestión de segundos, numerosas patrullas de ambos cuerpos hacían acto de presencia en el portal y confirmaban que se trataba del presunto autor.
El joven, un marroquí de unos 25 años de edad, llevaba manchadas varias prendas de sangre, supuestamente del forcejeo que entabló con la víctima.
Acto seguido, los agentes procedieron a la lectura de sus derechos y procedieron a su detención. Instantes después de ser arrestado, en cumplimiento con el protocolo establecido procedieron al traspaso de diligencias al Cuerpo Nacional de Policía.
Mientras tanto, en la calle Reyes Católicos número 140, los investigadores procedieron al precinto de la zona. Sobre las 01.45 horas de la madrugada, una dotación de la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía se desplazó hasta la zona donde presuntamente se produjo la violación para recopilar pruebas del delito.
Durante todo el día de ayer numerosos testigos prestaron declaración en la jefatura policial. Está previsto que en las próximas horas el arrestado pase a disposición judicial.