Un barco crucero con sede en Palma sufrió una avería importante de motor frente a la costa italiana de Génova, con más de 1.500 pasajeros a bordo. Muchos de ellos son ciudadanos extranjeros afincados en Mallorca.
Un portavoz de la compañía «Island Cruises», propietaria del barco averiado, «Island Star», explicó ayer: «La electricidad y el agua han sido restablecidas a las áreas donde están los pasajeros, pero nuestros mecánicos siguen trabajando en los motores para arreglar los problemas». El barco está a la deriva, si bien ninguno de los pasajeros ha sufrido daños, añadió el portavoz.
Un pasajero a bordo del barco explicó ayer tarde, en declaraciones telefónicas, «estamos bien, pero llevamos 20 horas a la deriva y nos han informado que vamos a ser trasladados a Mallorca y nuestro crucero se acabará mucho más pronto de lo que inicialmente estaba previsto». El crucero salió de Palma el pasado fin de semana y tenía previsto recorrer todas las zonas populares del Mediterráneo. La noticia de la avería se conoció ayer entre la colonia británica de Mallorca y causó inquietud. No obstante, poco a poco los familiares y amigos de los afectados pudieron contactar con ellos y tranquilizarse al saber que estaban bien